Maltrato animal Cuento

Cuento

Hace mucho tiempo en una ciudad un matrimonio decidió adoptar un perro, ya que pensaban que era lo mejor para que sus hijos aprendieran lo importante y frágil que es la vida, al llevar al pequeño cachorro a la casa los niños se alegraron y de inmediato entraron en discusión para ver de quien era ese pequeño perro, la madre les aclaro que el cachorro era para los dos pero, ambos seguían con la discusión, él padre les hizo una propuesta a ambos :

-El que sea más responsable y cuidadoso con el cachorro será su dueño- La esposa sumergida en sus pensamientos empezó a murmurar, los niños no prestaron atención y solo respondieron con un alegre y energético –¡ Sí !-
la madre tomo al cachorro y lo puso en una pequeña cama (que previamente había comprado a espaldas de los demás integrantes de la familia), al ponerlo en la pequeña y tibia cama mando a sus hijos a que se prepararan para ir a dormir, ya que al día siguiente tenían clases por la mañana, además que tenían que ir por varias cosas para el cachorro recién llegado

A la mañana siguiente todos se levantaron a hacer sus actividades matutinas e ir a desayunar, los niños al acabar de alistarse bajaron sonrientes y con mucha energía nunca antes vista por los padres de aquellos pequeñines, la niña tomo al cachorro y le dio de comer mientras que el niño estaba desayunando, la mamá felicito a la niña con una gran sonrisa mientras que el niño vio lo sucedido.

Enseguida del desayuno era la hora de ir a la escuela.
-Mama hoy quiero quedarme a cuidar el perro, total no he faltado con mis deberes de la escuela- dijo con entusiasmo el niño a la mama, la madre vio al padre, el padre rechazo con la cabeza
-no mi vida, el perro se quedara solo por un tiempo pero estará bien, es un perro inteligente, y cuando salgas le compraremos lo que necesité- Dijo la mama dándole el lunch de su hijo,
-ok mama- su hijo toma su almuerzo con una desilusión conmovedora- En la escuela el niño se sentía preocupado por el perrito, mientras la niña jugaba con sus amigas, el niño se para de su banca y le pregunta a su hermana,
- ¿Cómo es que no estas preocupada por el Estefany?- dijo el niño con un pequeño tono a disgusto
- mama dijo que estaría bien, es un pero listo- dijo la niña con un curioso tono arrogante.

Mientras tanto el perrito desesperado por probar un bocadillo se subió a la alacena, y se tropezó porque era muy resbalosa la marquesina, el perrito se lastimo una pata, era tanto el dolor que ladraba para que alguien lo socorriera, pero nadie le escucho.

Al salir de clases, el niño quería ir lo más pronto posible al ver su cachorro, su mamá le dice que sea paciente pero es imposible apaciguar la felicidad del niño,

Su hermana le dice
- porque te preocupas tanto por el Thomas, no lo has cuidado tanto como yo, el perro será mío-
Thomas se queda perplejo
- a mí ya no me interesa si lo cuido o no, yo solo quiero que sea feliz y que lo pueda acariciar y jugar con el-.

Aun en el carro Thomas pensaba en que cosas comprarle al perrito mientras su hermana no dejaba de hablar de que hará  con él cuando el perro sea de ella, sacarlo a pasear, alimentarlo, darle de comer, bañarlo, y su hermano lo ignoraba, viendo la actitud de Thomas el padre le pregunta
-¿ por qué tan callado tomas?- tomas deja de pensar y le contesta a su padre,
- es que quiero que no le falte nada al perrito, quiero que sea feliz, para poder ser feliz yo con él- el padre al escuchar tal respuesta se queda pensativo,.

...