ACTIVIDADES FORESTALES PESQUERAS Y MINERAS

ACTIVIDADES FORESTALES Y PESQUERAS

En material forestal, uno de los factores de mayor desequilibrio ecológico está representado por los llamados incendios forestales que afectan la vegetación natural, el hábitat de la fauna, las propiedades físicas de los suelos y las oportunidades de recreación.

De igual manera, la explotación comercial de los bosques puede ser negativa cuando no se adoptan medidas para preservarlos y cuando, por el contrario, la acción humana se reduce a la deforestación irracional y, por lo tanto, a la destrucción de grandes extensiones de esos bosques. Se impone, pues, el uso inteligente y el manejo responsable de los mismos, de manera que estén al servicio del hombre en forma permanente.

La riqueza marina está siendo destruida por el uso incontrolado de la pesca de arrastre. Este tipo de pesca destruye las condiciones naturales en que se desenvuelve la fauna marina, e incluso elimina toda fuente de reproducción de las especies.

Los derrames de petróleo crudo en el lago de Maracaibo están destruyendo la riqueza ictiológica, que ha servido como fuente de sustento para un sector importante de la población en esas partes del país.

ACTIVIDADES MINERAS

Las explotaciones mineras, particularmente las practicadas a cielo abierto, deterioran la superficie terrestre e impiden que se le pueda dar uso agrícola.

Ese deterioro conduce a un aceleramiento de la erosión y al surgimiento de contaminación por acumulación de sedimentos en los cauces fluviales.

Por otra parte, la actividad industrial que se está registrando en el noreste de Guayana como consecuencia de las explotaciones mineras amenaza con convertir los ríos Orinoco y Caroní en grandes depósitos de desperdicios si no se adoptan medidas rápidas y efectivas al respecto.

En este sentido es oportuno referirse a los estudios iniciados por la corporación venezolana de Guayana y orientados a ejercer el control sobre el medio ambiente. Esa corporación ha ejecutado proyectos para proteger las aguas de los ríos Orinoco y Caroní, así como proyectos relacionados con la instalación de filtros en las fábricas procesadoras de minerales para evitar la contaminación de la atmosfera.

Otros problemas ecológicos originados por la explotación minera incontrolada, tienen que ver con la deforestación de áreas consideradas como vitales para el país, como es el caso de la selva guayanesa y el uso del mercurio para la extracción del oro en los ríos. Aun cuando es un elemento sumamente toxico, el mercurio, junto con el aceite y otras sustancias contaminantes, es arrojado por los mineros a los ríos de Guayana una vez concluida la extracción del oro contenido en la arena y el barro.

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