Desnutrición infantil en La Guajira-Colombia

La Desnutrición infantil, un tema que nos concierne a todos.                                                                

La Desnutrición infantil, un tema que nos concierne a todos.

La desnutrición infantil de la comunidad indígena Wayuu en el departamento de La Guajira

María Ángel Ojeda Arzuaga

Universidad Sergio Arboleda – Sede Barranquilla

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María Ángel Ojeda Arzuaga-Facultad de Comunicación social y periodismo

Primer semestre.

El presente trabajo cuenta con las correcciones realizadas por la docente Jenny Jurado, encargada de la asignatura Lectura y escritura académica I en la Universidad Sergio Arboleda sede Barranquilla.

Cualquier mensaje con respecto al artículo debe ser enviado al correo institucional de la estudiante maria.ojeda02@correo.usa.edu.co perteneciente a la Universidad Sergio Arboleda.

LA DESNUTRICIÓN INFANTIL, UN TEMA QUE NOS CONCIERNE A TODOS.

La desnutrición infantil en la comunidad indígena Wayuu, ubicada en el departamento de La Guajira, no es solo cuestión de falta de alimento, es un problema que va más allá de las condiciones precarias que presenta esta comunidad y trasciende incluso a un conflicto social. Sin embargo, a pesar de que este problema es conocido por la sociedad en general, causa indignación  saber que  es un tema de poco interés para muchos. Por lo que surgen los siguientes interrogantes ¿Por qué debería ser un tema de interés social?, ¿Cuáles son esos factores afectan tanto la salud de los niños de la comunidad indígena Wayuu?, ¿No es supone que es el gobierno nacional el encargado de proteger a estos niños en estados de desnutrición?, en el presente texto se pretende dar respuesta a los presentes interrogantes, además de generar conciencia en la sociedad para que en conjunto se encuentre pronta solución a todos esos problemas que están acabando con la salud y vida de los niños pertenecientes a la comunidad indígena Wayuu.  

Los Wayuu son la comunidad indígena más grande de toda Colombia, cuentan con una población de aproximadamente 270.000 personas, a pesar de esto es desconcertante decir  que es una de las más abandonadas en todos los aspectos. La península de la Guajira además de ser una zona semidesértica es un territorio inhóspito, carente de todo, quienes en su gran mayoría viven en un alto grado de pobreza y sobreviven gracias a las artesanías, el pastoreo, la cría de chivos y la pesca, son solo algunos quienes tienen la posibilidad de  trabajar en el turismo o en la minería de sal y carbón. Sumado a ello gracias a la gran escases de agua con la que cuenta el departamento,  tienen que caminar kilómetros para conseguir agua no apta para el consumo humano que la recogen en pequeños jagüeyes y que a su vez la comparten con los animales; ni hablar de las largas distancia que existe entre una comunidad y la otra, y también el hecho de que las vías son sumamente intransitables. Toda esta radiografía es el diario vivir de los indígenas wayuu, lo que dificulta aún más las posibilidades de ayudas para esta comunidad.

La alimentación especialmente durante los primeros 5 años de vida, es fundamental para el crecimiento y desarrollo de todo ser humano, donde la falta de la misma puede generar daños irreversibles, tanto física como mentalmente en el crecimiento y a la salud del niño.

A pesar de que las estadísticas  a nivel nacional indican que en los últimos 5 años han disminuido los casos de desnutrición por  falta de alimentación;  otra cosa es lo que se evidencia en el departamento, ya que cada día las cifras van en aumento. Y Según datos del gobierno, para el 2019,  hubo aproximadamente unos 1.607 casos de desnutrición infantil  catalogados como graves, de los cuales hubo alrededor de 46 niños y niñas menores de 5 años que fallecieron  por causa de EDA (enfermedad diarreica aguda), en los diferentes centros asistenciales  del departamento. Lo que nos hace cuestionar ¿A dónde se están dirigiendo dichas ayudas del gobierno?, y ¿Por qué no mejora la situación en la comunidad indígena Wayuu?, A continuación

se expondrán algunas de las rayones más importantes por las cuales esta difícil situación, que acaba con la niñez y la vida de muchos niños en el departamento de La Guajira no mejora.  

En los últimos años el gobierno  ha tratado de implementar ayudas para acabar con el hambre y la desnutrición. Pero en el departamento nos afecta otro flagelo “la corrupción”, lo que ha llevado a los organismos del Estado a tomar cartas en el asunto, debido a la malversación de fondos con los recursos del Programa de Alimentación Escolar “PAE”, donde se han visto involucrados numeroso políticos y se comprobó que se han perdido más de 30.000 millones de pesos; lo que  ha permitido gracias a las numerosas investigaciones llevar a prisión a todos esos políticos insensibles y responsables de tan macabros homicidios en el departamento. Es precisamente esta  desenfrenada corrupción la principal causante de que no se avance ni un poco para mejorar esta penosa y difícil situación.

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