ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

EL MOVIMENTO ESTUDIANTIL EN COLOMBIA Y LA FILOSOFÍA POLÍTICA


Enviado por   •  30 de Septiembre de 2022  •  Ensayo  •  4.522 Palabras (19 Páginas)  •  67 Visitas

Página 1 de 19

EL MOVIMENTO ESTUDIANTIL EN COLOMBIA

 Y LA FILOSOFÍA POLÍTICA

Camilo Hernando Mendoza Pinilla[1]*

La filosofía política latinoamericana ha venido creciendo a grandes pasos teniendo en cuenta las nuevas y originales posturas que surgen de las necesidades propias del continente. Se buscan nuevas formas de pensar y cómo éstas pueden llegar a ser posibles. La historia del pensamiento filosófico político la podemos rastrear desde la colonia o independencia pero el punto importante o de quiebre es cuando algunos pensadores del continente empiezan a pensar la posibilidad de pensar la realidad propia y cómo con la filosofía se puede hacer una denuncia a las injusticias, explotación y miseria en Latinoamérica. En este contexto aparece la llamada filosofía de la liberación. Como lo afirma María L. Lukac de Stier en su ensayo Panorama Histórico de la filosofía política latinoamericana.

Para los “latinoamericanistas” es posible hablar de una filosofía política latinoamericana porque la filosofía auténtica consiste en meditar sobre la propia realidad, señalando los grandes problemas que la afectan, denunciando las injusticias que sufren los pueblos latinoamericanos como consecuencia de la prepotencia de quienes los explotan nacional o internacionalmente, y presentar posibles maneras de superar esa situación.  (Lukac, 2008: 60)

Bajo este pensamiento vemos filósofos como Leopoldo Zea, Arturo Roig, Juan Carlos Scannone, Guillermo Hoyos, Enrique Dussel, entre otros. Varias de estos se conectan con una clara postura que va en contra de la globalización, la radicalización y universalización de un solo tipo de pensamiento, en este caso el occidental. Dentro de estas propuestas hay una clara apuesta por la alteridad, teniendo en cuenta que: “su propósito no es corregir mentiras y decir la verdad, sino «pensar de otro modo, moverse hacia “una lógica otra” –en suma cambiar los términos, no sólo el contenido de la conversación»” (Escobar, 2003: 64). Con la alteridad inevitablemente se hablará de las reivindicaciones de aquellos excluidos; estas reivindicaciones se hacen visibles o se materializan por medio de los movimientos sociales.

El objetivo de este ensayo es hacer un somero examen desde algunas categorías y análisis de la filosofía política latinoamericana de uno de los movimientos más importantes de las luchas sociales de Colombia, a saber: el movimiento estudiantil. Se puede rastrear este movimiento desde la misma colonia; el movimiento estudiantil colombiano es heredero de una lucha histórica que ha logrado importantes victorias, pero que en general ha sido un camino lleno de represión, radicalización y víctimas. A pesar de ello se puede decir que la resistencia del estudiantado es un caso de cómo desde Latinoamérica se podría pensar desde la alteridad y por qué no desde la trans-modernidad -que Dussel propone-, que es pensar la modernidad, no partiendo sólo de la negación, sino desde el lado oculto de ésta, es decir desde la perspectiva del otro. “La trans-modernidad es un proyecto de orientado-futuro que busca la liberación de toda la humanidad” (Escobar, 2003: 64).  El movimiento estudiantil colombiano ha tenido momentos en donde su historia es la misma la lucha contra la homogeneidad ontológica y política –eurocéntrica- que adolece nuestro continente.

  1. Breve recorrido histórico del movimiento estudiantil en Colombia

Los estudiantes colombianos han sido los continuadores de luchas históricas por una educación de calidad y al alcance de todos. El movimiento estudiantil se puede rastrear desde la misma colonia cuando muchos estudiantes inconformes por la educación escolástica, resultado de la tardía Edad Media, se manifestaban en las calles de Santa Fe.

En este sentido podemos decir que tanto la Península como su extensión en América participaron en todas las manifestaciones del espíritu europeo, tanto del Medioevo como del Renacimiento, de la Ilustración, del Romanticismo y del Positivismo. La particularidad es que todas estas corrientes llegaron a España cuando el resto de Europa ya había tomado una dirección filosófica distinta. (Lukac, 2008: 54)

Este atraso en las ideas produjo que los movimientos sociales no tuvieran la misma fuerza que en Europa, aun así los estudiantes de la época por medio de protestas manifestaban su descontento por la precaria calidad de la educación. Ya luego los estudiantes se unieron a los movimientos independentistas del siglo XIX. Se debe tener en cuenta que tal independencia es resultado de ese atraso cultural respecto a Europa, dice Lukac citando a Stoetzer: “la ilustración no hizo la independencia, la independencia hizo la ilustración” (Lukac, 2008: 56). No es que la independencia no haya sido negativa para el continente, pero no fue lo que se esperaba respecto a los ideales de la ilustración, aunque desde un análisis más profundo, en Europa tampoco es que la ilustración se haya llevado a cabo en su totalidad.

El movimiento estudiantil fue uno de los que ayudó al fin de la época de la regeneración obligando a la renuncia de Reyes en 1909. Las ideas filosóficas que llegaron durante esta época a Latinoamérica fueron algo del socialismo utópico, nacionalismo y democracia romántica, pero la que más caló fue la del positivismo. “El influjo del positivismo tuvo su impacto más fuerte en Brasil y México. En Brasil, políticamente el positivismo puso punto final al Imperio, y se estableció una dictadura positivista a través del programa elaborado por Teixeira Mendes.” (Lukac, 2008: 58). En Colombia ese positivismo no fue tan determinante, pues la ideología religiosa dominó la política en el país.

Dussel en filosofías del sur: Descolonización y transmodernidad (2015) en el capítulo sobre el populismo inicia un recorrido histórico del concepto en Latinoamérica desde las dos guerras mundiales y la crisis del 29, acontecimientos que determinaron geopolíticamente el continente. La primera guerra mundial causó que la mirada de las grandes potencias se enfocara en su propio centro descuidando la periferia, de ahí la posibilidad del surgimiento de una clase burguesa industrializada y en consecuencia de una clase obrera de una revolución industrial tardía en nuestro continente. Colombia por el contrario a algunos países de Latinoamérica no se alejó mucho de la mirada y dominio de EE.UU al contrario, se “vendió” Panamá y supuestamente se inició un proceso de modernización. Pero en la educación no se veía tal avance pues

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (29 Kb) pdf (157 Kb) docx (23 Kb)
Leer 18 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com