EL TALENTO HUMANO COMO ÍNDICE DE CALIDAD DE LAS POLÍTICAS INSTITUCIONALES

EL TALENTO HUMANO COMO ÍNDICE DE CALIDAD DE LAS POLÍTICAS INSTITUCIONALES.

Autora: Marilis De Horta Martinez

El éxito de una institución va ligado a los aspectos organizacionales que en ella estén inmersos, es decir; en lo económico, social, jurídico y ambiental. Brindando así la estructura y la capacidad para la lograrlo. Por ende, influyen factores como el talento humano, el ambiente laboral, y el mercado, ya que estos permiten determinar la calidad y productividad de la empresa.

De esta manera, es importante resaltar el rol que cumplen las políticas institucionales para lograr las metas propuestas por la organización y garantizar una buena gestión, siendo estas decisiones escritas que se establecen como una normativa, para los miembros de una compañía, sobre los límites dentro de los cuales pueden operar en distintos asuntos. Este proporciona una ruta de acción lógica y sólida. De esta forma se evita decidir de manera repetitiva sobre temas de rutina que inciden en la eficiencia de la empresa.

En relación a las políticas organizacionales en el ámbito de la educación, estas deben ser diseñadas considerando principalmente al talento humano de la institución y a su vez debe haber un sistema de comunicación claro y permanente entre todos sus actores con el fin de que se cumplan sus objetivos. Teniendo en cuenta, que al momento desarrollar las políticas institucionales en una organización educativa es necesario involucrar a todos los miembros de la institución educativa que, de alguna u otra manera, puedan verse afectados por las mismas y que estas les impidan llevar a cabo su labor de manera eficiente. A mayor participación de las personas, mayor probabilidad de éxito para la implementación de la política institucional^[1].

Esto último minimiza la resistencia y garantiza que la política no se convierta en una interferencia para el desempeño de funciones y así se irá facilitando el cumplimiento de los compromisos propuestos por la institución. Sin embargo, no es del todo eficiente el trabajo interpersonal cuando estas son diseñadas sin tener en cuenta las limitaciones que puedan presentarse en la actividad educativa, por ejemplo, cuando se desea brindar un servicio de educación de calidad sin contar con dictadores con su respectiva especialización en las áreas del saber, y disponer de obligaciones innecesarias para suplir esa necesidad como en el caso de dictar asignaturas fuera de su contexto profesional.

Siendo así, la constitución de las políticas institucionales educativas una poderosa herramienta para lograr y consolidar la calidad institucional en todas sus dimensiones. Calidad que puede ser visualizada a través de una mayor eficiencia de los procesos de mejora de la comunicación, promoción del empoderamiento todo el personal administrativo y de apoyo, y cumplimiento eficaz del propósito de la organización, aunque estas dependen de dichos factores, deben estar siempre previstas desde distintos escenarios de manera que no solo sean una normativa a cumplir, sino unas pautas que permitan un constante cambio a lo largo del desarrollo de la educación.

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