Ensayo sobre el El aborto o la adopción

El aborto o la adopción ¿Cuál es la salida?

El tema del aborto es uno de los temas que generan más discusión. Hay quienes opinan que el aborto es un acto inhumano que no se debe ni pensar así haya algún riesgo en el embarazo. Otros opinan que la postura anterior es demasiado conservadora, además de ridícula, ya que no sería justo traer a un bebé a este mundo si nacerá con malformaciones o pone en riesgo la vida de la madre.

Además de esas situaciones, también está la situación del embarazo no deseado en el que la madre simplemente aborta porque no quiere tener a su bebé o no tiene los recursos para cuidar de él. Es en este caso en el que nos vamos a centrar en este texto.

Cierto día, cuando estaba cursando mis últimos años de bachillerato, fui partícipe de una conversación con mis amigas en la que discutíamos sobre este tema. El tema surgió de la pregunta “¿Qué harían si quedaran embarazadas en este momento de su vida?”. Muchas respondieron que se quedarían con el bebé y cuando llegó mi momento de opinar mi respuesta fue que lo daría en adopción ya que yo no me sentiría preparada para dejar todos mis sueños para cuidar a un bebé, además de que no tendría los medios para mantenerlo. En cuanto esas palabras salieron de mi boca, se creó el caos. La mayoría de mis amigas, dijeron que ellas jamás harían eso y que preferían abortar al bebé, mientras yo seguía firme en mi posición.

Esa discusión me dejó pensando bastante. No podía creer que una persona prefiriera acabar con una vida, en vez de tratar de darle una mejor. Tal vez las personas piensen así porque no tienen una idea clara de lo que es la adopción y el proceso que ésta lleva.

La adopción es un proceso en el cual el menor a adoptar no es entregado inmediatamente a la familia que desea adoptarlo, ya que se sigue con un proceso bastante riguroso. Se investiga a la familia, que sea apta para cuidar al menor y tenerlo en las mejores condiciones posibles. No es un procedimiento que se tome a la ligera, además de que después de que al menor lo ubican con la familia, éste sigue siendo vigilado hasta que después termina siendo dejado allí permanentemente.

Además, la página del ICBF, que es la institución encargada de éstos procesos en Colombia, en su página web tiene un espacio en donde se pueden ver las preguntas más frecuentes respecto a los mismos (Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, s.f.).

Las personas normalmente tienden a juzgar a aquellas madres que dan a sus hijos en adopción (Berrozpe, 2010); diciendo que el niño en un futuro se enterará de que fue adoptado y se sentirá rechazado, y es más que obvio que al niño/a en un futuro habrá que confesarle y aclararle su situación, pero es preferible decirle que fue dado en adopción, a ponerle en la situación de muchos niños de hoy en día; situación el que fueron abandonados por sus padres, y que al no ser dados en adopción oficialmente, deben esperar un largo y tedioso proceso en el que se busca a su familia hasta en sexto grado de consanguineidad para asegurarse de que no posean un familiar que desee hacerse cargo de él, para por fin decidir que puede ser dado en adopción —ya que de no hacerlo, los familiares podrían denunciar el caso— (El Heraldo, 2014). Este tipo de procesos tardan bastante tiempo; tiempo en el que el menor podría perder oportunidades de ser adoptado, además de que él crece y sus probabilidades disminuyen.

Lo mejor que una madre, que no está en condiciones de cuidar un bebé y que no quiere hacerlo, puede hacer, es dar a su bebé en adopción, darle una mejor vida, en vez de abortarlo.

Ésta decisión es bastante difícil, pero es lo mejor que se puede hacer hablando de la vida del bebé. Muchas madres dicen no querer hacerlo, ya que sentirían un remordimiento de por vida, así que prefieren quedarse con él, no siendo lo mejor. ¿En serio usted preferiría ver a su hijo con bastantes necesidades, que saber que pudo darle una vida mejor entregándolo a alguien que si pudiera mantenerlo bien y darle el mismo amor que usted va a darle? Yo creo que con lo que no podría vivir, es sabiendo que mi hijo pudo tener un mejor futuro, pero por mi egoísmo no se lo permití.

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