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Liderazgo Político y Económico de China en América Latina


Enviado por   •  4 de Enero de 2021  •  Informe  •  1.866 Palabras (8 Páginas)  •  110 Visitas

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UNIVERSIDAD FERMÍN TORO[pic 1]

VICE – RECTORADO ACADÉMICO

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS

ESCUELA DE CIENCIA POLÍTICA

PUERTO RICO COMO UN PAÍS

NEOCOLONIZADO POR ESTADOS UNIDOS

Autores: NESTOR ÁLVAREZ.

Docente: JOSÉ QUINTERO.

RELACIONES INTERNACIONALES EN AMÉRICA LATINA.

BARQUISIMETO, AGOSTO DEL 2020

UNIVERSIDAD FERMÍN TORO[pic 2]

VICE – RECTORADO ACADÉMICO

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS

ESCUELA DE CIENCIA POLÍTICA

Resumen:

El crecimiento de la República Popular China es, en cierta forma, admirable, considerando que hasta la penúltima década del siglo anterior, la mayor parte de su población estaba en la pobreza extrema. Sin embargo, actualmente es un actor internacional que lidera gran parte del mismo sistema internacional, ejerciendo mucha influencia en diversos países y territorios, a través del despliegue de acciones geopolíticas que han permitido el estado actual del país asiático. Por ese motivo, la región de América Latina no escapa de la esfera de influencia de China, especialmente en aquellos países con las economías más grandes en el propio territorio americano.


        La República Popular China es el país más poblado en el planeta, con una historia y cultura que datan desde miles de años, a pesar que su constitución como Estado contemporáneo es relativamente reciente, pues a mediados del siglo XX es que se forma la República Popular China tal como se conoce a día de hoy, por lo menos a nivel político y territorial (considerando que décadas más tarde se anexo Hong Kong.)

        Asimismo, es importante recordar que gracias a las reformas económicas impulsadas por Deng Xiaoping en 1978, China se ha convertido, según estimaciones de distintos organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, en el segundo país más grande a nivel mundial en términos de Producto Interno Bruto nominal, es decir, es el segundo país con más dinero en el planeta.

        Sin embargo, se debe esclarecer que China no puede ser considerada como un país desarrollado, pues sus niveles de pobreza, desigualdades, libertades, entre otros factores, impiden que se perciba a este gran país como totalmente desarrollado. No obstante, esto no impide que China sea de lejos la economía emergente más importante a nivel mundial, ya que desde hace más de unas tres décadas, el Banco Mundial estima que su promedio de crecimiento anual es del 10%, esto refiriéndose al PIB. Además, en aspectos geopolíticos la República Popular China ha aumentado su esfera de influencia en un nivel global, gracias a las relaciones comerciales, inversiones e intereses geoestratégicos.

        Por tal motivo, antes de analizar sus relaciones con América Latina y la influencia que ejerce en esta parte del planeta, es necesario comprender que China, dejando a un lado su historia como productor de bienes de consumo baratos y deficientes, se convirtió en el mayor consumidor de materias primas del planeta y, por otra parte, sus bienes y servicios responden cada vez más a la hiperespecialización, observándose de esta manera que en China la educación y la competencia se ha potenciado cada vez más.

        En ese sentido, debido al acelerado crecimiento económico y productivo de China, más su amplia población, desde hace un par de décadas el país asiático ha incrementado abruptamente sus niveles de consumo energético, especialmente de aquellas materias de origen fósiles. Así pues, diversos medios estadísticos calculan que China ya pasó a Estados Unidos como el mayor consumidor de petróleo en el mundo y, desde hace algunos años, como el mayor consumidor de carbón. Ahora bien, se sabe que China posee grandes reservas en estos dos rubros, especialmente en carbón, y que su capacidad de producción es enorme, pero debido al alto consumo, la producción interna no alcanza para abastecer ni la mitad de lo que consume, por lo cual necesita y depende de las importaciones de estos productos fósiles ¿Y dónde hay grandes reservas de petróleo, gas y carbón? Precisamente en América Latina.

        Por otra parte, al ser un productor líder en diversos bienes de consumos, es normal que dependa de tantas materias primas para poder llevar a cabo sus ejercicios económicos. A este punto, la región latinoamericana en general posee una amplia gama de diversos recursos naturales que pueden ser utilizadas como materias primas. Es por ello que, en una región con tantas riquezas naturales y recursos fósiles, la influencia de un gigante como China dentro de América Latina no se escapa del análisis internacional. Mientras que para los países latinos representa una oportunidad enorme, considerando que China es un mercado sumamente grande, en el cual muchos bienes y servicios entran en importantes cantidades; a medida que China consolida su desarrollo, su propia sociedad comienza a consumir productos que antes no eran tan relevantes en el mercado, como por ejemplo el café, que también se encuentra en abundancia en la región latina.

        Aunado a los puntos expuestos, la estrategia de China en su política internacional ha sido ocupar el espacio que Estados Unidos ha mantenido en el sistema internacional, como el principal actor del mismo. Por ello, en los diversos organismos multilaterales su presencia es cada vez más importante, ejerciendo un rol de influencia sumamente grande, cuya base se centra en las acciones geopolíticas y geoestratégicas. De allí se entiende el sólido respaldo de este actor internacional en la Asamblea General de las Naciones Unidas, incluso en acuerdos multilaterales como el firmado en la XXI Conferencia sobre Cambio Climático (COP 21) o mejor conocido como “Acuerdo de París”, en materia del cambio climático.

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