TODOS EN ALGÚN MOMENTO FUIMOS ANTIHÉROES

              TODOS EN ALGÚN MOMENTO FUIMOS ANTIHÉROES

        Por: dahian tangarife – yara reyes

Según el diccionario un antihéroe es un personaje de una obra de ficción que desempeña el mismo papel de importancia y protagonismo que el héroe tradicional, pero que carece de sus características de perfección por tener las virtudes y defectos de una persona normal. Esto nos da lugar a pensar que un antihéroe carece de aquellas virtudes de los héroes tradicionales, que es alguien capaz de sentir, alguien que puede fallar, alguien que se puede rendir, por lo que le da una realidad más humana pero… ¿entonces todos podríamos ser antihéroes? ¿Qué nos convierte en uno?

Todos en algún momento quisimos ser reconocidos, quisimos ser como aquellos personajes de nuestros juegos y caricaturas, quisimos salvar al mundo o tener algún súper poder, todo en un contexto de fantasía, como Superman que venía de otro planeta y era casi indestructible o como hulk que a través de su furia desataba una gran fuerza, podíamos ver como estos personajes pasaban por diferentes situaciones, se encontraban en grandes aprietos pero al final de todo, con su fuerza de voluntad, casi siempre salían victoriosos. ¿Sería fantástico ser como ellos, no? Pero cuando echamos un vistazo a nuestra realidad las cosas dan un giro completamente brusco y nos damos cuenta que todos estos personajes sólo pueden caber en nuestra imaginación y que la injusticia reina en nuestra sociedad.

Pongamos como ejemplo a don quijote, alguien que a través de su imaginación y gracias a aquellos libros fantásticos que leyó, se aventuró a forjar su propia historia, pero se encuentra con una realidad cruda, no era musculoso ni mucho menos joven, no tenía habilidad con las armas y se encontraba  en un entorno

muy adelantado a su visión, pero aún así quería justicia, aunque no siempre lo lograba.

Entendemos como “antihéroe” a alguien que a pesar de carecer de dotes, poderes o valentía tiene un fin, pretende hacer justicia, pero sin importar a quien deba matar o si lo que hace es realmente moral en su actual sociedad, otro ejemplo de esto lo podríamos encontrar en el personaje Jack Sparrow;  a pesar de ser un gran espadachín, el embaucador pirata prefiere utilizar sus habilidades verbales para persuadir a sus oponentes y lograr sus objetivos, y sólo pelea cuando es el último recurso, pues es un gran negociador. Al ser pirata, es obvio que siempre va a querer hacer lo que más le convenga, como abandonar a sus amigos para salvarse, pero al tener una moral ambigua, finalmente decide regresar y ayudarlos. Es adicto al ron y tiene mal higiene, pero eso no parece ser un obstáculo al enamorar a las mujeres. Aquí también vemos como un antihéroe no es perfecto, educado ni moralmente un modelo a seguir, así nosotros todos podemos ser antihéroes, cuando en algún momento quisiste hacer lo que consideramos justicia, no importa si moralmente no fuese lo correcto ni tampoco si hayamos salido victoriosos o nos rendimos en el intento.

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