¿y Tu Cuanto Cuestas?

En una sociedad donde todo se ha convertido en una mercancía Y tú cuanto cuestas?, cuestiona filosóficamente a la gente de las calles de la ciudad de México y Nueva York sobre su relación con el dinero, la vecindad geográfica o la influencia cultural.

La película nos hace ver y nos asegura que los círculos de poder que controlan al mundo ven al ser humano como un producto, el cual está diseñado y programado para consumir otros productos. Las profundas reflexiones, invitan al espectador a cuestionar el sistema que rige a la civilización occidental.

Por el título, podríamos pensar que el documental le daría vueltas a la misma pregunta durante dos horas, pero no es así. Inteligentemente explora las diferentes implicaciones y temas relacionados. Básicamente plantea que todos somos un producto que forma parte del sistema económico mundial (un engrane mas en la gran maquinaria), un sistema de consumo. Así, somos manipulados y adoctrinados para consumir otros productos y de esta manera permitir que el mismo sistema siga subsistiendo, pero nuestro valor para este sistema depende de cuantos de estos productos somos capaces de consumir, de ahí la pregunta “¿y Tú, Cuanto Cuestas?”.

también toca temas como la economía, el petróleo, la guerra, el racismo, las drogas, la televisión etc. Algunos podrán decir que el contenido es por momentos tendencioso o sesgado, pero no creo que peque de nada que otros documentalistas no.

¿Cómo afecta nuestra manera de pensar el vivir en un sistema económico dominado?, ¿o por el contrario, uno dominante?, ¿Cómo percibe cada quien su realidad?, ¿Cómo percibe la realidad de los demás? y ¿Qué es lo que cada quien considera valioso e importante? Aunque inicialmente todo parezca un ataque al capitalismo gringo, a final nos damos cuenta (al grado que cada quien quiera ver) que todos formamos parte del sistema y tenemos nuestra dosis de responsabilidad. Mas que darnos respuestas definitivas, nos deja las preguntas abiertas para que cada quien las responda por si mismo.

En el aspecto técnico si me sorprendió gratamente, fue mas de lo que creí. No solo el ritmo es ameno y mantiene el interés

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