Ensayo sobre los trastornos alimenticios y su relación con la ciencia y la tecnología

Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Puebla

Plantel Chignahuapan

Ensayo sobre los trastornos alimenticios y su relación con la ciencia y la tecnología

Materia: Ciencia, Tecnología, Sociedad y Valores

Profesora: L.A.E. Jaqueline Cortés Rodríguez

Alumno: Efraín Ríos Hernández

N.L. 32

Carrera Técnica: Soporte y Mantenimiento de Equipo de Computo 5 “C”

Chignahuapan, Puebla.

“Existe una fuerza más poderosa que la fusión, la bomba atómica y el magnetismo; la voluntad humana.”

                                                                ALBERT EINSTEIN

Trastornos alimenticios y su relación con la ciencia y la tecnología

Introducción

En la actualidad, los estereotipos son una imagen que los jóvenes, y en ocasiones personas adultas, copian y ejecutan sin saber lo que significa realmente. Estas modas son simplemente procesos que las empresas o gobiernos ponen en práctica para generar más ventas o tener controlado al pueblo. Muchas veces, estas acciones son buenas, y por buenas me refiero a que no tienen repercusiones en la salud del que la ejecuta; un ejemplo es el peinado, que sólo afecta a tu imagen y no tu salud. Sin embargo, algunas veces, estas modas se salen de control y se convierten en enfermedades o padecimientos para el que la sigue.

        En el siglo XXI, la figura y la apariencia se ha vuelto una de la acciones más importantes del mundo adolescente, es por eso que muchos productos relacionados con la belleza han surgido, tales como ropa, calzado, artículos para el cabello; pero también, la imagen de modelos y la exigencia a su figura ha aumentado, provocando la aparición de personas súper delgadas y famosas. Esto trae como consecuencia obvia que muchas personas, en su mayoría mujeres, intenten parecerse  a la modelo, y en consecuencia, sigan dietas muy rigorosas, dejen de comer, o incluso, que comiencen a ingerir productos que solamente dañan a su cuerpo.

        Estas acciones, se vuelven un problema para las personas que la sigue, haciendo de las mismas más vulnerables a enfermedades. Se conocen como padecimientos psicológicos y físicos, y en su mayoría están relacionados con la salud. Es por eso que la Organización Mundial de la Salud englobó todas estas enfermedades en trastornos alimenticios. Hay que dejar en claro, que no forzosamente una enfermedad de este tipo tiene que tener estas causas, pero en su mayoría, muchos casos son provocados por querer seguir una moda. Aunado a esto, la información relacionada a estos padecimientos en los años pasados era muy poca, era por eso  que muchas personas enfermaban y no sabían que hacer o como combatirla. Y lo peor, es que, en la actualidad, aun pasa tan desapercibido el padecimiento, que cuando se reacciona, ya se encuentra en niveles críticos para la persona y puede llegar incluso a la muerte.

Desarrollo

Los trastornos alimenticios no siempre se van a presentar por seguir una moda, muchas veces nacen como consecuencia de hábitos de comida o de la preocupación por la figura corporal. Según la Asociación Nacional de Desordenes de Alimenticios, los trastornos alimenticios se definen como “condiciones complejas que emergen de la combinación de conductas presentes por largo tiempo, factores biológicos, emocionales, psicológicos, interpersonales y sociales”^[1].  Esto quiere decir que siempre detrás de la presencia de un trastorno alimenticio, siempre va a haber una situación psicológica o física que lo provoque; un claro ejemplo es la preocupación por el peso que conlleva a dietas muy extremas o incluso el cese de ingesta de alimentos (conocida como anorexia), esto se presenta por la preocupación del peso que es algo físico, o por el miedo a las burlas y baja autoestima, que es algo psicológico.

        Su presencia de este tipo de enfermedades tangibles y reales, se encuentra en mayoría en personas adolescentes o en la adultez temprana, pero hay casos donde también se presenta en la infancia. Y muchas veces son provocados por las siguientes causas. Psicológicas: “Baja autoestima”, que se encuentra más presente en personas que sufren de burlas o bullying, o que no están seguras de su cuerpo. “Depresión, ansiedad, enojo o soledad”; que son las principales causantes de hacer que una persona sufra de los trastornos. Factores interpersonales: “Problemas con la familia”, esto sin duda, termina en un trastorno, aunque no siempre en uno alimenticio, en su mayoría lo es. “Historia de abuso físico y discriminación por su peso”, que es el principal factor que afecta a jóvenes y niños, y que los hace caer en problemas como la anorexia, bulimia, entre otros. Y sociales: “Presiones culturales que glorifican la delgadez”, y esto es precisamente los estereotipos que se encuentran más marcados en los jóvenes y que muchas veces lo hacen caer en algún trastorno; en su mayoría anorexia. “Definición de belleza basada en la figura y peso de una persona”; esto hace que una gran cantidad de personas se involucren en dietas rigurosas o el parar de alimentarse, y en su mayoría terminan en anorexia aguda.

Aunque no está cien por ciento comprobado, muchas instituciones científicas consideran que en ocasiones todos estos problemas son provocados por factores biológicos, donde se analiza la participación del ambiente y de las tendencias de las familias como una causa que desemboca en algún trastorno alimenticio. Y es por eso que se recomienda la participación médica en este tipo de enfermedades, ya que una ayuda profesional puede significar el movimiento de la balanza entre la vida y la muerte.

        Un trastorno alimenticio siempre tiene relación con los hábitos de alimentación de una persona, es por eso que para combatirlos, primero se debe comenzar con corregir su alimentación y la manera en que lo hace, antes de que el padecimiento se haga presente. Según investigaciones del ministerio de sanidad, “las personas acceden a un universo sensorial, antes de conocer el valor nutritivo de los alimentos, en el que se han desarrollado determinados patrones culturales alimentarios y esto condiciona sus hábitos"^[2]. Esto conlleva a pensar que primero se debe instaurar una conciencia alimentaria en las personas, antes de implementar estrategias para la cura de este tipo de enfermedades.

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