El capítulo siete empieza contando sobre la guerra

        El capítulo siete empieza contando sobre la guerra, lo que se vivió durante esta guerra en Macondo y cómo esta había terminado, metieron presos al coronel Aureliano Buendía y a su hombre de confianza, Gerineldo Márquez, al coronel Aureliano lo condenaron a muerte por fusilamiento y este pidió como último deseo morir en Macondo. La noche del fusilamiento, su hermano José Arcadio Buendía, llegó con arma en mano a salvarlo. El capitán del pelotón de fusilamiento, capitán Roque Carnicero, y sus hombres trataron de salvar al general del lado liberal Victorio Medina, pero cuando fueron a rescatarlo ya había sido fusilado por el otro bando. Junto a un ejército, el coronel Aureliano le declaró la guerra al régimen y fue nombrado jefe de las fuerzas revolucionarias, a su hombre de confianza, Gerineldo Márquez, lo nombró jefe civil y militar de Macondo. Gerineldo estando tan cerca de la familia de Aureliano Buendía, se enamoró de Amaranta y le dijo que quería casarse con ella, pero Amaranta le dijo que no, Úrsula le pide a Amaranta que se case con Gerineldo y ella siguió diciendo que no y aseguró que nunca se casaría con él. Llega a Macondo una noticia devastadora, tanto así que un hilo de sangre atravesó el pueblo de Macondo, José Arcadio Buendía y Rebeca vivían lejos de su familia y con el hilo de sangre, Úrsula determinó que habían matado a su hijo José Arcadio.

        En el capítulo ocho se nota cómo Amaranta ve a su sobrino Aureliano José, ya no era un niño ni era pequeño, era grande y este se fue enamorando de ella y quería acostarse con ella. Empezaron jugando con simple inocencia, un día lluvioso se durmieron juntos, luego se volvió un coqueteo y estos se desnudaron y se acariciaban, pero nunca llegaron a tener relaciones sexuales. Úrsula casi los agarra y esto hizo que Amaranta pensara en todo y corta su relación con Aureliano José. Este deserta el ejército para volver a Macondo para tratar de conquistar a Amaranta, pero esta lo rechaza por segunda vez porque extrañaba a Gerineldo Márquez. Una noche, Aureliano José andaba por las calles y Aquiles Ricardo, un capitán del gobierno, lo asesinó con una pistola, su padre, el coronel Aureliano Buendía llega a Macondo con todo su ejército. Al volver su madre, Úrsula, se da cuenta de que había perdido su corazón, no literalmente, pero emocionalmente.

        El capítulo nueve empieza con las conversaciones entre el coronel Aureliano Buendía y su hombre de confianza y coronel Gerineldo Márquez. El coronel va a la casa del general Moncada para entregarle objetos personales del general ya que este había muerto, a la vez le saqueó y quemó su casa. Luego llegan varios abogados, exactamente seis, en busca de la firma del coronel Aureliano Buendía en varios acuerdos, estos acuerdos iban en contra del pensamiento del coronel, pero igual aceptó. Gerineldo Márquez ve estos acuerdos como una traición y es mandado a condena de muerte por sus pensamientos. Úrsula, madre de Aureliano le pide que acabe con la guerra y que vuelva a casa a ser el hombre de la casa, pero este como no tenía corazón luego de la guerra, no tenía ni las ganas, pero lo hizo por su madre. El coronel Aureliano Buendía firma un acuerdo para terminar con la guerra e intenta suicidarse, pasa un tiempo y ese se recupera del intento de suicidio y ahí acaba el capítulo.

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