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Adios Al Maestro


Enviado por   •  16 de Septiembre de 2014  •  405 Palabras (2 Páginas)  •  242 Visitas

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UN HASTA LUEGO AL BUEN MAESTRO

Permítame iniciar estas palabras con una pequeña historia en la que interfiere la mano del maestro.

Estaba golpeado y rallado y el subastador creía que no valía la pena gastar tanto tiempo en un viejo violín, pero lo mostró con una sonrisa.

- ¿Cuánto ofrecen queridos amigos? –gritó

- ¡Un dólar! –Y luego

– Dos

– ¿Quién ofrece tres?, Tres a la una, tres a las dos, se va por tres…PERO NO.

Desde el fondo del salón salió un hombre de pelo cano, caminó al frente y recogió el arco, luego tras sacudir el polvo del viejo violín y estirar las cuerdas flojas, tocó una melodía tan dulce y tan pura como el canto de un ángel.

La música cesó y el subastador con voz baja y queda dijo:

-¿Cuánto ofrecen queridos amigos por el viejo violín? Y lo levantó junto con el arco.

- ¡Mil dólares!

- ¡Dos mil dólares!

- ¡Tres mil dólares!

- Tres mil dólares a la una, tres mil dólares a las dos. - Y se fue por tres mil dólares.

La gente aplaudió pero algunos exclamaron ¿Qué cambió su valor?

La respuesta fue inmediata: EL TOQUE DE LA MANO DE UN MAESTRO.

Muchos hombres sin vida, sin armonía, golpeados y con cicatrices se subastan baratos a la muchedumbre irreflexiva, tal como el viejo violín.

Pero llega el maestro y la muchedumbre tonta nunca termina de entender el valor de un alma y el cambio forjado por el toque de la mano del maestro.

Con estas palabras y bella historia quiero decirles gracias maestros por ser buenos maestros los consideramos así, ya que según nosotros los niños, un buen maestro es aquél que se disfraza de un amigo, de lector, de compañero lleno de ternura, dignidad y de tenacidad indomable quien también reconoce aciertos y errores y reconoce que sus propios alumnos se transforman en sus maestros en cualquier instante.

Una de las principales funciones del maestro ha sido y seguirá siendo el no admitir la mediocridad. Sí no eres ni fuiste un buen maestro, sencillamente NO ERES MAESTRO. Porque la presencia luminosa de estos seres se ha visto oscurecida por la molesta irrupción de maestros fracasados, irresponsables y expertos en eludir la gracia, la inteligencia y la vida.

Ojala que ustedes estén satisfechos con la labor de tan nombre profesión, que se retiren con la satisfacción y con la frente en alto por haber dejado a una niñez bien preparada y a un Oaxaca mejor.

¡POR SIEMPRE GRACIAS QUERIDOS MAESTROS!

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