Amor líquido Zygmunt Bauman

Amor líquido

Zygmunt Bauman

Zygmunt Bauman (1925),  este sociólogo de origen polaco que ha logrado refundir en sus escritos análisis casi aterradores de la cruel realidad que enfrenta la humanidad de hoy, con textos donde se muestra cómo la posmodernidad no sólo ha estremecido los cimientos de la política y las ideologías sino que además de la sociedad como y de las relaciones íntimas.

En su obra “Amor Líquido” habla de una época inestable sobretodo en el área de las relaciones humanas, analizando “la fragilidad de los vínculos humanos” y las relaciones incongruentes que surgen de ella. En esta retoma su concepto de “modernidad líquida”, donde predomina el hedonismo, el consumismo y la búsqueda egoísta y sin límites de la felicidad individual, elementos que han venido a socavar los nexos familiares así como otras formas de relaciones humanas.

Bauman establece una comparación entre la forma actual que tiene las personas de relacionarse, con interrelación que existe entre las personas por medio de las redes sociales.

Bauman menciona en su escrito a Leonia, una de las ciudades invisibles de Italo Calvino, como un lugar donde las personas "estrenan ropa nueva, extraen de su refrigerador último modelo latas sin abrir escuchando los últimos sencillos que suenan en la radio de última generación". Los habitantes de dicho lugar  producen y producen basura sólo por "el placer de expulsar, descartar, limpiarse de una impureza recurrente". Bauman, establece una comparación de los habitantes del mundo líquido con los de Leonia, aduciendo que estos dicen estar ansiosos por relacionarse, cuando en realidad hacen esfuerzos para que las relaciones no sean permanentes. "La soledad provoca inseguridad, pero las relaciones no parecen provocar algo muy diferente". Esto conlleva a eludir los lazos, el compromiso, en un estado de permanente ansiedad, de exaltación del deseo y de "consumo de relaciones". 

En épocas anteriores, era común escuchar a las personas ilusionarse con construir una familia, pensar en una pareja permanente y en la posibilidad de tener hijos. Los jóvenes de ahora sin embargo, se expresan de forma muy diferente; hablan de los hijos como un  “mal necesario” en algunos casos y en otros más extremos pero no menos comunes, señalan su deseo de no concebir hijos puesto que estos les resultarían de “lastre” para poder alcanzar sus sueños y metas. Esta situación ha llevado a la sociedad a la multiplicidad de posibilidades afectivas de corto alcance, posibilidades que en su gran mayoría tienen relación con la satisfacción de  placeres inmediatos y de vivencias eróticas, pero que en la mayoría de los casos no implican un amor comprometido.

La sociedad actual está cada vez más conectada a través de las redes sociales, por medio de los cuales se ambientan múltiples relaciones. Pero la comunicación natural del ser humano que es cara a cara, es cada vez más escasa. Es muy común en los sitios donde se reúnen las personas, llámese hogares, lugares de trabajo, instituciones públicas, zonas de recreación y demás, ver a la gente el silencio total, sumergidos en sus teléfonos móviles o tabletas, rechazando la posibilidad de compartir con las personas quienes le rodean por elegir a personas que en muchas ocasiones ni siquiera han conocido y quienes le responden con íconos o imágenes creadas por terceros. Aún más lamentable resulta saber que muchos jóvenes adolescentes depositan su felicidad y su percepción de éxito en la cantidad de “likes”  que pueda recibir por una publicación que haya hecho.  

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