DIONISO: SOCIEDAD HEDONISTA, SOCIEDAD ANTIDIONISÍACA

En la actualidad gracias a la globalización, vivimos en un mundo hedonista, motivado por el capitalismo; la abundancia, abandonado al éxtasis sexual, la psicodelia y las “furias del consumo” la teorizaba Jean Brun como la reaparición de Dioniso en el corazón de las nuevas sociedades, acabó con lo que se venia evidenciando, para bien o para mal las multitudes se mueven por todo un mundo publicitario, los medios de comunicación como la internet, la televisión, la radio. Promueven campañas, propagandas en donde le ofrecer el placer en un producto, que tal vez le podrá llenar su Ser.

Pero, ¿Podría tener precio la felicidad?

Un sí, un no; para el hedonismo si lo tiene. Puede conseguir placer de muchas maneras, puede ser un jean de marca o una cena en un buen restaurante, acudir a gimnasios, salones de belleza, salir "de compras", uso de joyas caras, buscar "nana" para los hijos, cirugías estéticas (no indispensables), comprar el auto más caro (sin requerirlo), no cocinar, sino pedir (domicilio). “Las orgias del consumo, bulimias de imágenes y de ritmos, erotismo furioso, frenesí de modas y de sensaciones: para J. Brun las pasiones que aparecen en las sociedades desarrolladas son búsquedas de vértigo y embriaguez que pongan un poco de sabor a una existencia cada vez mas insulsa”.

El hombre siempre con miras de estar cada vez mejor, el desarrollo y la tecnología pueden permitir que aumente su calidad de vida viéndose reflejada en el progreso del derecho, la justicia y las condiciones materiales de existencia. Vencer las epidemias es una de los más importantes avances de la ciencia.

Esa tendencia a comprar cosas innecesarias para nuestra vida, el hiperconsumo en el vivimos es un caos social. Como se dice prefieren aparentar ante la sociedad algo que no son, tal vez sin suplir una necesidad básica como alimentarse solo porque quería unos nike en lugar de unos adidas. O peor aun el desenfreno sexual que se está viviendo, creo que saben su nombre luego de un coito. El placer no significa que tienen que darse porque si, el se da cuando en realidad se siente. No hay necesidad de ser extremistas, en ese sentido es que choco con la concepción de ser hedonista.

Las personas desean vivir en un entorno social sin riesgo, sano donde puedan relacionarse con su interior, encontrando el amor, la identidad personal puesta para sí mismo y su familia.

Para concluir el hombre al ser compuesto por órganos, siente placer por sus sentidos como al escuhar las aves, al oler una rosa, al tocar algo suave, al ver alguien que le gusta o el simple hecho de saborear una colombina. Todo es un proceso y como humanidad estamos sujetos a adaptaciones rápidas y complejas.

Es algo natural.

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