¿Dar o no la vida por un ideal? ¿Esa es la cuestión?

[pic 1]¿Dar o no la vida por un ideal? ¿Esa es la cuestión?

A lo largo de la historia, muchas personas pusieron en juego su vida por defender un ideal, otras, sin embargo, prefirieron dar un paso al costado y salvar su integridad. [pic 2]Galileo Galilei y Giordano Bruno son dos hombres que frente a esta encrucijada tomaron caminos distintos.

 Si bien estos ejemplos son paradigmáticos, en la historia miles de personas en el mundo decidieron y deciden, si seguir su ideal cueste lo que cueste, o no,  algunos ejemplos son^[1]: José de San Martín, la Madre Teresa de Calcula, Los médicos sin fronteras, Mahatma Gandhi, Las madres de Plaza de mayo, Carlos Jáuregui.

El siguiente trabajo invita a que pueda realizar un ensayo que visualice las reflexiones sobre este tema, siguiendo el ejemplo de Galileo y Bruno. Para su escrito deberá buscar información (recuerde que la misma debe ser confiable).

Les recomiendo los siguientes archivos y videos:

https://www.youtube.com/watch?v=k-rG5l1JEGo

http://www.nationalgeographic.com.es/historia/grandes-reportajes/giordano-bruno-el-filosofo-que-desafio-a-la-inquisicion_7273

https://www.youtube.com/watch?v=QUBsvUfnwz4

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Pautas formales:

 Extensión: mínimo 1 hoja y media, máximo 3 hojas.

Alienación: Justificado

Letra: Arial Nº11.

Interlineado: 1,5.

Márgenes: sup. inf. izdo. y dcho: 2,5

Dar la vida por un ideal

Un ideal hace referencia a una idea, a una meta, algo a alcanzar, una aspiración, por la cual se tiene convicción y determinación. Es aquello que cada uno forja para alcanzar todo lo que se propone, lleva a esforzarse, luchar y dirigir todos sus esfuerzos, energías para alcanzar sus objetivos. Tal como hicieron muchas personas a lo largo de la historia, las cuales, en muchos casos, no solo se esforzaron y dieron lo mejor de sí para alcanzar sus ideales, sino que también los defendieron con convicción, incluso dando la vida.

Dar la vida por un ideal es lo dicho anteriormente, es creer en algo fuertemente, defenderlo ante los demás en situaciones adversas, sacrificar la propia vida antes de renunciar a las propias convicciones. Significa mucho valor, amor y admiración a lo que uno hace, creer que es más importante demostrar la importancia del ideal, que seguir viviendo teniendo que renunciar al mismo. Porque aunque el hombre muera, su ideal perdurará y hasta quizás se haga más fuerte y tenga mayor influencia.

Giordano Bruno fue un claro ejemplo de dar la vida por un ideal. Nació en Italia durante una época donde la base de la ciencia era la religión, estas no podían contradecirse, y en el caso de que se contradijera la religión era perseguido por la inquisición. Bruno, que era un creyente, rechazaba, como Copérnico, que la Tierra fuera el centro del cosmos; no sólo eso, llegó a sostener que vivimos en un universo infinito repleto de mundos donde seres semejantes a nosotros podrían rendir culto a su propio Dios, que el Sol era solo una estrella más de las infinitas que abarcaban el universo, entre otras posturas que iban en contra de la interpretación que en ese momento se tenía de la biblia. Se lo obligo a retractarse y al no ceder fue perseguido hasta culminar con su vida en una hoguera. Giordano Bruno nunca dudó de su ideal, ni sucumbió a las presiones que el contexto de la época le ponía, creyó fuertemente en un su ideal y lo defendió con la vida.

 Galileo Galilei fue otro ejemplo de la lucha por un ideal, apoyaba las ideas de Giordano Bruno, y a su vez sostenía que los planetas no eran una perfecta esfera, sino que eran irregulares, y logro comprobar muchas de las teorías de Bruno mediante el uso del telescopio. Explayo sus descubrimientos en dos libros que fueron repudiados y censurados por la iglesia, ya que sostenían que contradecían a la biblia. Aunque no murió por sostener su ideal, si lo defendió y sostuvo hasta el día de su muerte, en su casa donde se encontraba preso, sentencia que dictó la iglesia al calificar sus descubrimientos científicos como herejes.

 Marie Curie, quien le entregó su vida a un ideal, nació en Varsovia el 7 de noviembre de 1867, hija de un profesor de física y una maestra que murió cuando ella tenía 11 años. Desde niña fue una alumna brillante, con una excepcional capacidad de concentración, y a los 24 años se marchó a París a desarrollar una carrera científica, ya que en Polonia las mujeres no podían acceder a una educación universitaria. Sobrevivió con los ahorros de haber trabajado durante tres años como institutriz en Varsovia, la escasa ayuda que le enviaba su padre y el apoyo de su hermana mayor, Bronia, que vivía en la capital francesa. Terminó sus estudios en Física siendo la mejor de su promoción, un año después de esto, en 1893, conoció al científico Pierre Curie.

Vivieron austeramente dedicados de lleno a su trabajo. Tuvieron dos hijas, Iréne y Eve. Como investigadora, estaba interesada en los nuevos tipos de radiación descubiertos por Roentgen y Becquerel. Utilizando las técnicas piezoeléctricas inventadas por su marido, Marie midió las radiaciones de uranio en la pechblenda, un mineral rico en dicho elemento. Cuando vio que las radiaciones del mineral eran más intensas que las del propio uranio, se dio cuenta de que tenía que haber elementos desconocidos aún más “radiactivos” (término que ella inventó).

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