Disertación sobre el texto eaquinas fe y razón

DISERTACIÓN sobre “FE VERDAD Y CULTURA”

Anteriormente se recurría a la religión para resolver las preguntas relacionadas con el ser humano y su origen. Actualmente se ha abierto un conflicto sobre que la verdad se puede lograr mediante la filosofía, a parte de la religión. Las religiones nos pueden dotar de conocimientos relacionados con nuestro origen y, en algunos casos, nos puede llegar a ayudar en el proceso de alcanzar la verdad, es decir, entender el mundo tal y como es, con su historia, su cultura, etc. Pero a la hora de hablar de nuestro origen a través de la religión, nos podemos llegar a preguntar cuestiones que la religión no es capaz de resolver, pero la filosofía sí. Por eso, se ha creado un conflicto sobre si, para conocer la verdad, son necesarios ambos ámbitos: filosofía y religión. El objetivo de esta disertación es dar mi opinión basándome en argumentos reales sobre la cuestión planteada anteriormente.

El texto sobre el cual disertamos, nos quiere decir que existe una relación entre teología (la cual se encarga del estudio de Dios) y filosofía. Esto es que la búsqueda de la verdad se hace a través de la razón y la religión. Admite también que la filosofía no debería cerrarse a otras ciencias ni al mensaje que quiere transmitir la Biblia. Desde mi punto de vista, el articulista autor del texto sugiere una buena visión de la búsqueda de la verdad, ya que para preguntarse cuestiones que otras ciencias no pueden responder, es necesario tener otras visiones, por lo tanto es necesario razonar, pero enfocándolo de una manera más filosófica; mientras que a la hora de preguntarse sobre la existencia de un ser superior también es necesario recurrir a la religión, aunque de todas formas hay que pensar transcendentalmente para llegar a conclusiones con sentido para nosotros.                             Según el Papa, la filosofía pretende ser la religión de verdad, ya que la filosofía se pregunta sobre si el hombre puede conocer la verdad, su origen, su futuro, etc. La cuestión de la verdad es la cuestión esencial de la fe cristiana y, en este sentido, la fe tiene que ver inevitablemente con la filosofía.                                                                                                                                                    En la obra “Cartas del diablo a su sobrino”, C.S.Lewis se pregunta por la verdad: “que la única cuestión que con seguridad nunca se planteará es la relativa a la verdad de lo leído.”                                      Josef Pieper, reproduciendo el pasaje de C.S Lewis, quiere proporcionar al lector una comprensión histórica y así excluir la cuestión de la verdad. Pero en el trasfondo de esta interpretación histórica hay una filosofía: no tiene sentido preguntar sobre lo que es ; solo podemos preguntar sobre lo que podemos hacer con las cosas. A favor de Lewis está U. Luz, que afirma que la crítica histórica ha abdicado en la edad moderna de la cuestión de la verdad; ahora ya no hay una verdad a buscar más allá del texto. Otra obra a destacar sobre la misma temática y tesis es “Fredo”, escrito por Platón, en el que afirma que el arte de escribir es el elixir de la memoria y la sabiduría; por lo que se relaciona con la historia como una parte esencial de la conservación de los hechos históricos que se quedaron escritos, y que hoy en dia conocemos lo que conocemos gracias a ellos. Platón, sin embargo, dice : “esto producirá olvido en las almas de los que lo aprendan por descuidar el ejercicio de la memoria, ya que fiándose de la escritura recordarán de un modo externo”.                             Actualmente lo podemos ver en los medios de comunicación como pueden ser los programas de televisión, que inundan al hombre de información y le hacen sabio de apariencia.                                           A todo esto, Platón no rechaza la escritura, sino que hace de ella un uso agradecido. H. Schade muestra el núcleo de lo que Platón quiere decirnos: “ es el predominio de un método filológico y de la pérdida de realidad que se sigue, de lo que nos previene Platón”.                                                             A. Kreiher advierte: “el abandono del convencimiento de que se puede remitir con medios lingüísticos a contenidos extralingüísticos equivale al abandono de un discurso de algún modo aún lleno de sentido”. Sobre la cuestión de los contenidos extralingüísticos, el Papa añade: “la interpretación de la palabra de Dios no puede llevarnos de interpretación en interpretación, sin llegar nunca a descubrir una afirmación verdadera”. El hombre puede buscar el acceso a lo real, que se puede conseguir a través de las palabras, con lo que estoy de acuerdo, ya que para poder obtener información hay que hacer lecturas de todo lo relacionado con lo que nos interesa saber, y en esas lecturas existe una parte filosófica que explica lo relatado.                                                               Sin embargo, Paolo Flores d´Arcais afirma: “la cultura católica oficial no tiene ya nada que decir a al cultura”. Cuando d´Arcais rechaza la encíclica del Papa, está empleando la filosofía. La filosofía tiene que preguntarse siempre sobre el hombre y, por consiguiente, cuestionarse siempre sobre la vida y la muerte, sobre Dios y la eternidad, etc.                                                                                             Por otra parte, Gotthold Ephralm Lessing afirma que la cuestión de la verdad es irresoluble y se sustituye por la cuestión del efecto curativo y purificador de la religión. Esto tiene algo de razón ya que un objetivo de la religión es dar seguridad a los seguidores de dicha religión, facilitándoles respuestas que quieren oir, basadas en conclusiones filosóficas.                                                                    Ernst Troeltsch reflexionó sobre la cuestión de la religión y la cultura, y de la verdad y la cultura. Según él, la validez del cristianismo se convierte en un asunto europeo. Yo, en este caso no estoy demasiado de acuerdo, ya que en Estados Unidos hay un amplio conjunto cristiano. Aún así, el Papa radica la capacidad de diálogo entre las culturas.                                                                                    Actualmente, hay un debate sobre la relación entre el cristianismo y las religiones universales, donde hay dos puntos de discusión:

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