Guerra en el bolsillo

Guerra en el bolsillo

Era un hombre que nació en Estados Unidos, toda su vida escucho acerca de los enemigos en el

medio oriente, de los malvados actos que habían realizado. Conforme fue creciendo su lealtad hacia

su familia y país se volvió inmensa, así que como buen patriota americano disfrutaba del

armamento y las historias heroicas de guerras pasadas, es por esto que se unió al ejército, con la

esperanza de vencer a estos villanos que Estados Unidos mostraba como gente que quería destruir

su país.

A su mismo tiempo del otro lado del mundo en Afganistán, un hombre que nació pasado el 11 de

septiembre, repetidamente se preguntaba, ¿Qué hacen los estadounidenses en nuestro país?, ¿Por

qué matan a personas inocentes?, ¿Por qué mataron a mi familia?, estas y muchas eran las

interrogantes que seguían diariamente las personas del medio oriente. De la misma manera que el

americano, él se enlisto a su milicia local para la defensa de su país.

Pasando la guerra, el americano fue viendo el horror de la guerra que ellos cometían, volviéndose

reluctante a matar civiles a primera vista, en una ocasión al despejar casas se separo de su grupo

para asegurar el área, esperando ninguna resistencia el americano entro a una de las casas que

quedaba por despejar sabiendo que después del bombardeo probablemente nadie quedaba vivo o

todos habían evacuado. En eso al abrir la puerta recibe un fuerte golpe con un palo en la cabeza,

por suerte su casco protegió su cabeza, era el afgano que prefirió intentar noquearlo a disparar y

llamar la atención de todo mundo, el afgano había fallado y su una pelea a la muerte cuerpo a

cuerpo inicio. La pelea rápidamente se fue a favor del americano que con su entrenamiento superior

logro incapacitarlo y desarmarlo, dejándolo en el suelo con su arma apuntada hacia él.

Y ahí estaban, con el americano apuntando su arma al desarmado hombre, el afgano vio a un

hombre alto, rubio, de tez color blanca, tecnología futurista, descrito como un ángel de la muerte,

mientras el americano vio a un hombre de poca estatura, tez morena y pelo negro como la noche

en su cuerpo contaba con muchas cicatrices, un rostro cansado y con una cara de aterrorizado ante

el americano. Es ahí cuando se dio cuenta que el afgano de igual manera sentía emociones y es un

ser humano, es aquí donde se cuestionó, ¿vale la pena sacrificar mi humanidad por seguir las

ordenes de mi país que todo me ha dado?

One man's terrorist is another man's freedom fighter.

-Nelson Mandela.

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