Principales cuestiones que se plantean en la filosofía social y política

El propósito del ensayo es ofrecer una guía completa de las principales cuestiones que se plantean en la filosofía social y política.

Por lo tanto, aunque podamos considerar que las cuestiones relativas al papel adecuado del gobierno nacional son políticas, y que las cuestiones relativas a la crianza de los niños son sociales más que políticas, es evidente que las políticas nacionales, o la falta de ellas, pueden tener efectos importantes sobre la naturaleza y la calidad del cuidado infantil.

El nivel más básico, los Estados han reclamado el derecho a aprobar leyes que limitan la libertad de los ciudadanos y han mantenido que éstos tienen el deber de obedecer.

Se asemeja a la cuestión de si el hecho de que el Estado haya ordenado o prohibido ciertos comportamientos es en sí mismo una razón moral para obedecer, y si la falta de obediencia es, al menos, un mal moral prima facie o una violación del deber.

Después de examinar varias formulaciones de estos argumentos, incluyendo los enfoques contemporáneos, Simmons encuentra que ninguno es lo suficientemente fuerte como para fundamentar las reclamaciones de autoridad política por parte de los estados reales o existentes, aunque permite que algunos estados concebibles (idealmente democracias contractuales libres y justas) puedan reclamar con razón la autoridad sobre sus ciudadanos.

Concluye que, en el mundo real, no deberíamos presumir que tenemos la obligación de obedecer las órdenes o leyes de los Estados, incluso los decentes, sino juzgarlos caso por caso.

(Obsérvese que este análisis se basa no sólo en un examen filosófico de las diversas teorías de la autoridad y la obligación, sino también en una evaluación de si los Estados reales deben cumplir o cumplen los criterios establecidos por estas teorías, y en qué medida).

Aquellos lectores junto con Simmons, se muestren escépticos sobre las pretensiones de los Estados de ejercer una autoridad legítima, pueden ver el ensayo como una pregunta sobre cuándo las restricciones legales a la libertad individual están justificadas, o respaldadas por razones de mérito suficiente para apoyar la restricción.

Aunque muchos lo identifican con el gobierno de los regímenes comunistas represivos, muchos estudiosos han encontrado en la obra del pensador del siglo XIX Karl Marx un enfoque humanista y no represivo para criticar no sólo las estructuras económicas capitalistas, sino también gran parte del pensamiento liberal-democrático.

Como argumenta Miller, el marxismo pone en tela de juicio muchos de los supuestos de la teoría política liberal-democrática, y proporciona una alternativa menos individualista que el liberalismo para entender y evaluar el orden político y social.

En la teoría social y política, las feministas se han planteado cuestiones como la naturaleza de la igualdad de las mujeres, la forma de conseguirla, la existencia y el alcance de los prejuicios masculinos en la teoría política tradicional, y el desarrollo de teorías morales que reflejen las experiencias de las mujeres y den voz a una mayor variedad de perspectivas que la de los enfoques tradicionales.

Como indica Held en su contribución, las teóricas feministas difieren entre sí en muchas cuestiones, por lo que no debe pensarse en el feminismo como un enfoque monolítico del pensamiento social y político.

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