Uso del gerundio

Uso correcto del gerundio

Ejemplos

Gerundio durativo: Indica un estado o una acción no concluida combinado con un verbo de duración (seguir, continuar, etc.).

Sigo creyendo que ella volverá a buscarme.

Gerundio de modo: Indica la manera en la que se realiza una acción, como adverbio de modo del verbo principal (funciona como complemento circunstancial).

Los alumnos estudiaron para el examen leyendo todos los textos asignados.

Gerundio de simultaneidad: Manifiesta acciones que se realizan al mismo tiempo que la acción del verbo principal.

El ama de casa lavó la ropa pensando en lo que cocinaría más tarde.

Estoy comiendo y viendo televisión.

Gerundio de anterioridad: Presenta una acción anterior a la acción del verbo principal.

Llegando a la fiesta, se encontró con su mejor amiga.

Uso incorrecto del gerundio

Ejemplos

Gerundio de posterioridad: En ningún caso el gerundio puede indicar un hecho o suceso posterior al referido en el verbo principal.

Preparó una torta sacándola del horno una hora después.

(*) Preparó una torta y la sacó del horno una hora después.

Gerundio en función adjetiva: No se puede emplear el gerundio como si fuera un adjetivo, es decir, modificando un sustantivo.

Recibimos un oficio invitando a los profesores de la universidad a un almuerzo de camaradería.

(*)Recibimos un oficio en el que se invitaba a los profesores de la universidad a un almuerzo de camaradería.

Gerundio de consecuencia: El gerundio no debe ser empleado para establecer relaciones de causa-consecuencia. Para ello, debe emplearse nexos que cumplan esta función, tales como: por lo cual, por lo que, por la que, por ello, etc.

La sequía fue muy prolongada, muriendo gran parte del ganado antes de que llegaran las lluvias.  

(*)La sequía fue muy prolongada, por lo que murió gran parte del ganado antes de que llegaran las lluvias.