Agraria en la Revolución Mexicana.

Carácter Agrario de la Revolución Mexicana

Las razones por las que la Revolución Mexicana es considerada de carácter agrario, son múltiples. La Revolución Mexicana fue llevada a cabo por campesinos y trabajadores que veían a la Revolución como la única solución a la gran represión del pueblo Mexicano. La mayor inconformidad consistía en que las tierras no eran repartidas equitativamente, y que habían sido removidas a los campesinos de manera muy injusta. Los diversos planes implementados durante la Revolución Mexicana, también giran en torno al problema agrario. El Plan de San Luis, propuesto por Francisco I. Madero declara al Latifundismo como un problema que necesitaba ser resuelto, en la que muy poca parte de la sociedad gozaba de las tierras útiles, mientras que la gente que las trabajaba no obtenía ningún beneficio, siendo así una explotación que causo el descontento de la población mexicana. Lo que también desató un problema de desigualdades sociales, ya que como se mencionó antes, la riqueza estaba concentrada en muy poca población. Lo que Madero proponía dentro del Plan de San Luis era la devolución de las tierras que habían sido arrebatadas durante el gobierno de Díaz. Parecía que los problemas serían resueltos de acuerdo al Plan de San Luis, sin embargo al no serlos, Emiliano Zapata y su descontentó comenzaron otro movimiento en el que ya no se apoyaba más a Madero, debido al incumplimiento  de sus promesas mediante el Plan de Ayala, que establecía la devolución de tierras y bienes, proponiendo otras alternativas en las que especificaba que los ciudadanos que contaran con los títulos de sus propiedades, las cuales se les habían arrebatado, acudirían ante tribunales especiales. El plan de Ayala es uno de los factores más importantes a considerar de por qué la Revolución fue de carácter agrario, ya que este plan a diferencia del Plan de San Luis, coloca al problema agrario como el centro del problema en México. Tras varios intentos por resolver el problema agrario, pero sin éxito alguno, trae el plan de Guadalupe, lanzado por Venustiano Carranza en contra de Victoriano Huerta. Dicho plan, también va en la defensa de la problemática que el país estaba enfrentando, ya que Victoriano Huerta buscaba traer al frente la dictadura de la que México tanto había luchado por terminar. Dentro del Plan de Guadalupe también se habla del problema agrario, mencionado en el Artículo segundo “emitir leyes agrarias que favorezcan la formación de la pequeña propiedad, disolviendo los latifundios y restituyendo a los pueblos las tierras de que fueron injustamente privados”. (Venustiano Carranza, 1913). Así mismo, debido a la Ley Agraria implementada, se oficializó el agrarismo, que consiste en la distribución uniforme de la tierra, el problema por el cual los campesinos y trabajadores habían decidido crear una Revolución con el apoyo de Madero. En conclusión podemos decir que el problema agrario se encuentra en todos los momentos de la Revolución Mexicana como principal objetivo, gracias a este enfoque, surgieron otras alternativas como el ejido, pasando a ser parte del Estado para el beneficio de todos, así como también el poder concentrado en algunos desapareció debido a esta gran transformación en México. Cabe mencionar que otro aspecto muy importante por el cual la Revolución Mexicana es considerada de carácter agrario, es el hecho que gracias a la Reforma Agraria los propietarios de las tierras de manera injusta, fueron expulsados y los campesinos tuvieron la oportunidad de recuperar sus tierras. En conclusión podemos decir que debido al carácter rural de México, en aquel entonces, las tierras eran una fuente de ingreso muy importante, ya que gracias a ellas, existía una gran diferencia entre ser de clase alta o de una baja, creando así una poderosa razón para desatar una Revolución.

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