REMARQUE Erich María. Sin novedad en el frente [In Westen nitchs Neues] Barcelona, Círculo de lectores, 1968

Jorge Mario Medrano

Universidad Nacional Autónoma de México

2014

REMARQUE Erich María. Sin novedad en el frente [In Westen nitchs Neues] Barcelona, Círculo de lectores, 1968 [1929] Pp. 239

De la Primera guerra mundial se puede encontrar diferentes voces: algunos se muestran como los ganadores, que creen en la democracia y en las posibilidades de una nueva vida, como se observa en muchos de los discursos de los presidentes de los aliados que le ganaron la guerra a Alemania. Obviamente fuentes francesas como alemanas no dejan de admitir que fue un enfrentamiento muy violento, que cobró millones de vidas. La voz del ex soldado alemán Remarque es una de aquellos que lograron sobrevivir, pero capaz de presenciar como sus compañeros morían en combate, así como la derrota de su propia Alemania y por ende, entender que las vidas de sus compañeros fueron quitadas en vano. El fue parte de esos muchachos alemanes que con dieciocho años, partieron a la segunda guerra más fuerte que ha tenido a la humanidad y es su novela el testimonio de esta, que parte como protesta para no dejar que el país vuelva a entrar a otra, por el nacionalismo dominante que existió en su país para 1929, año mismo de la primera publicación en periódicos de Sin novedad en el frente.

Lastimosamente Alemania no solo entrará a otra guerra más escalofriante, sino que el libro será quemado en pila pública y su autor exiliado a Suiza y luego a Estados Unidos. Vivirá la guerra desde el otro lado y será enemigo acérrimo del nazismo y seguirá su trayectoria de escritor.

El libro como tal está escrito en primera persona, el personaje principal es Pablo, él describe los errores de la Primera Guerra Mundial en tránsito, desde su comienzo hasta el final de la misma. Vale aclarar que habla desde el frente principal, desde las barricadas, pero donde no deja de desprenderse de su contexto. La vida de sus compañeros de combate y sus constantes fallecimientos, la juventud, los enfrentamientos, la cotidianidad del pelotón, las ideas nacionalistas, la pobreza y miseria de su contexto familiar y de su país, la pérdida de la humanidad y la sumisión a los superiores, son algunos de los temas escalofriantes que toca la novela. Principalmente el conflicto es consigo mismo, el cambio de su personalidad, de su perspectiva y la violencia que merma su vida y lo hace cuestionarse el sentido de la misma.

En el combate sus compañeros están unidos por el vínculo de las órdenes y la sumisión debida a los superiores. Como son tan jóvenes aún no tienen un sentido de la vida y la instrucción militar les disciplina y forma como verdaderos soldados. La vida en el frente los vuelve compañeristas los unos con los otros. Muchos temas que son tabú entre la sociedad toman un tinte de normalidad que los aproxima más. Aunque la vida en el frente es diferente, porque al momento de combatir, muchos de ellos mueren en la lucha, que la describe más como una masacre, donde los obuses, las minas, la ametralladora y los gases los diseminan por millares. Pero en este lugar no deja de existir la solidaridad grupal, donde se protegen a los heridos o llevan a sitios más seguros.

La vida no deja de ser fácil. Remarque dice que el soldado siempre tiene deber de hacer algo. No puede estar quieto. Así desde que entran al pelotón, donde los transforman en militares, obligándoles a tender camas, hacer ejercicio, aseo, mandados, etc.

La cuestión es que en el frente no es así, allí las condiciones son más duras. Pues no hacen aseo, por las mismas posibilidades del combate. Así que hay pestes de ratas, los hospitales no son descritos por su sanidad pero se determina lo asqueroso de ellos. En fin, las condiciones de vida son miserables.

Pero menciona la juventud de los muchachos que fueron atraídos por los mayores, en los que creían, sin saber que ellos se equivocaban aceptaron ir de soldados a la guerra, mientras ellos veían una victoria en la que creían ciegamente, fue por eso que perdieron rápidamente las esperanzas, porque no podían creer que estas personas, como los maestros de la escuela los mandaran a pelear, sin que pudieran desarrollar nunca una perspectiva propia de la vida. Es muy usual que los personajes se vean como seres superficiales, pero también son prácticos, saben la utilidad de las cosas que saben y se dan cuenta que todo lo que les enseñaron en ese contexto no les sirve de nada.

Pues a la hora de la verdad, mientras intentan sobrevivir en el campo de batalla, lo único que saben es matar y proteger lo que les queda de vida. La vida de estos muchachos se resume en estos enfrentamientos a sobrevivir por azar, no creen en otra cosa sino en intentar asesinar a los que les hacen mella. Cuando se hacen las descripciones en el campo de batalla, las barricadas, los sonidos y el hambre son los estímulos que hacen que los muchachos dejen de ser humanos “y se vuelvan

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