Técnica de la Arquitectura Griega

En la antigua Grecia (1200 a.C. - 146 a.C.) había una arquitectura verdaderamente excepcional, como podemos observar gracias a las ruinas que quedan de los templos, ágoras, acrópolis, teatros y oikos. Para los griegos, el espacio público cumplía un papel fundamental en su vida cotidiana. Es así como nació el corazón de la ciudad griega, el ágora. Este espacio de reunión agrupaba un templo, el bouleuterion, la skia y estaba delimitado por una stoa, en dónde se daba el comercio. El acrópolis era el espacio dedicado a las deidades que estaba ubicado en las partes mas altas de la ciudad. Los templos seguían casi siempre una forma rectangular en formato hexático, con seis columnas frontales y trece de profundidad y en algunos casos fue octástico (8 x 17). La composición del templo era de una recámara central (Naos) a la que se llegaba a través de un vestíbulo (Pronaos) que estaba delimitado, en su totalidad, por unas columnatas (Peristilo) y en la parte posterior había una recámara para los tesoros y ofrendas (Opistodomos). El templo, a pesar de que era un edificio de carácter público, no era de libre acceso y este estaba reservado a un grupo muy selecto de personas. En cuanto a los teatros, estos estaban configurados en forma semicircular y se edificaban siempre en las faldas de la montaña para aprovechar la pendiente requerida por las graderías. Estos edificios se componían de una orkestra o lugar de actuación, el theatron o el lugar para ver y la skena que comprendía los camerinos y servicios. Las residencias típicas griegas, Oikos, giraban en torno de un patio central al que se accedía por zaguán y que tenía un tanque de aguas lluvia (impluvium) y unas habitaciones a los costados de este patio. Los griegos se caracterizaban por desarrollar sus vidas en espacios al aire libre y los edificios se frecuentaban más en su exterior que en su interior. Dividían los espacios políticos de los religiosos pero buscaban siempre llegar a la perfección arquitectónica. Su técnica comprendía un sistema de construcción a través de la aplicación de grandes masas que usaba la técnica de pilares y dinteles. Este sistema trilítico consistía en, por medio de dos pilares separados a una distancia relativamente corta, sostener un dintel, que era una pieza horizontal en piedra, que iba apoyado en sus extremos sobre los pilares. Esta tipología podía repetirse ilimitadamente pero tenía la desventaja de no poder llegar a tener grandes luces, por las limitaciones técnicas del material.

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