ADMINISTRACIÓN POR VALORES

Capítulo III El proceso AVP

En este capítulo, considero importante resaltar que; para poder lograr un cambio de cualquier tipo se debe empezar con “uno mismo”, debido a que tenemos que estar dispuestos a darle tiempo al proceso; ya que lo difícil es lograr una alineación, dadas las necesidades, valores y expectativas que tienen las persona.

Tomando en cuenta que cada persona tiene expectativas diferentes, retomando la lectura, es importante tener bien establecidos los valores dentro de la organización ya que son estos los que alinean a la gente, los comprometen a todos a trabajar para alcanzar metas comunes.

De modo que la voluntad de creer en un conjunto convenido de valores y la diligencia continua para poner esos valores en práctica, nos lo nos servirán para lograr un cambio personal o al nivel departamento o área, sino que al nivel organizacional.

En conclusión a este capítulo, la Administración por valores no solo significa que hay que tomar decisiones difíciles, escogiendo lo que es correcto en lugar de de concentrarse en las utilidades a corto plazo, las cuales tal vez sean menos éticas; si no también podemos decir que la administración por valores va desde trabajar en uno mismo, en las decisiones que se pueden presentar al enfrentar un cambio, para posteriormente trabajar en equipo, transmitiendo disposición y aptitudes para poder lograr los objetivos en conjunto.

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