Análisis “El Cuervo” de Edgar Allan Poe

Universidad Santa María

Facultad de Ciencias Económicas y Sociales

Escuela de Comunicación Social

Formación Cultural

Análisis “El Cuervo” de Edgar Allan Poe

Profesor:                                                                                                   Alumna:

Pérez, Javier Reinaldo                                                                     Rudas, Mileidy

                                                                                                           C.I.28.448.721

Caracas,08 de agosto del 2019

Análisis “El Cuervo”

• Tipo de cuento: Poema

• Narrador: Primera persona

• Ambiente: Emotivo (Sufre la pérdida de su amada Leonora y nos relata cómo se desahoga con sus pláticas con el cuervo y lo que sigue sintiendo)

• Personajes: 

• El narrador: Un joven que sufre por la pérdida de su amor “Leonora”, sufrimiento que es palpable desde las primeras líneas del poema.

•  El cuervo: Pájaro cuya presencia repentina e inquietante despierta una sucesión de emociones en el narrador.

• Tiempo:

• Presente: “Y el Cuervo, sin un aleteo, sigue quieto… proyecta su sombra…”.

• Futuro: “nunca podrá mi alma desde esa sombra… elevarse”.

El narrador se muestra abrumado por la melancolía de un conflicto que tiene entre el recuerdo y el olvido, precisamente por el deseo de recordar a alguien que ya no está y el deseo de olvidarlo para siempre trasmitiendo la soledad en cada una de todas sus estrofas de manera más o menos óptica. Nos cuenta de forma anónima que, en una triste noche de diciembre, está leyendo un viejo libro cuando oye un golpeteo en la puerta de su habitación.

Se dice a sí mismo que no es más que un visitante, y que va a esperar el día de mañana porque no puede encontrar la liberación en su dolor por la muerte o perdida de su amada Leonora. Sin embargo, se dirige a la puerta, le pide perdón al visitante porque había estado durmiendo la siesta. Cuando abre la puerta, ve y no oye nada excepto la palabra “Leonora”, un eco de sus propias palabras.

 Al regresar a su habitación, nuevamente escucha un golpeteo con mayor fuerza y razona que probablemente era el viento afuera de su ventana. Cuando abre la ventana, un cuervo entra y rápidamente se posa “sobre un busto de Palas” sobre su puerta. Su aspecto arduo lo divierte y le pregunta por su nombre, el cuervo responde: “Nunca más”.                                  

No comprende la respuesta, pero el cuervo no dice nada hasta que él predice en voz alta que lo dejará mañana como el resto de sus amigos. Entonces el pájaro dice nuevamente: “Nunca más”. Sorprendido, dice que el cuervo debe haber aprendido esta palabra de algún dueño desafortunado cuya mala suerte le hizo repetir la palabra con frecuencia. Sonriendo, el narrador se sienta frente al cuervo para reflexionar sobre el significado de su palabra. El cuervo continúa mirándolo fijamente, mientras el narrador se sienta a pensar lo que quería decir el “Nunca más”.

...