Análisis de Los articulación en general

Tatiana Cortés Vargas

Camila González Cruz

Jhoanna Garzón Castillo

Universidad Pedagógica Nacional

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Análisis de Los articulación en general

Quiero empezar este escrito compartiendo un pensamiento que al finalizar las reflexiones de todos los artículos, surgió mientras los leía reiterativamente. Y es que no es fácil realizar un análisis con enfoque de género si no se conoce la realidad específica del territorio; en términos políticos, sociales, económicos y culturales. Pues este reconocimiento del contexto permite con más certeza un análisis profundo y fundamentado, donde así pueda tener mejor coherencia lo teórico. Superando visiones parciales del asunto, lo cual podría pasar en caso de que se conociera la problemática solo por un artículo. De esta manera recurrir a mas documentación es importante.

Lo que analice de los artículos observados, es que existen unas categorías constantes de las que se puede dar cuenta, como raza, clase, criminalización, Estado, poder, derecho, sistemas de dominación, extractivismo, hidroeléctricas. Tierra, agua, comunidad, participación y claramente mujer. Lo que haré es tratar de enmarcar estas categorías en mi análisis.

En todos los casos reflejados por la prensa, los territorios involucrados con proyectos de multinacionales reflejan comunidades marginadas del Estado en alguna medida, comunidades en lugares donde el conflicto armado ha sido muy fuerte, territorios con concentración de la tierra por terratenientes. Pero también con campesinos donde su vocación de la tierra ha sido la agricultura. O indígenas que en sus resguardos mantienen toda una cultura ancestral. Y en cada una de estas esferas, preguntarse por la incidencia que todo esto ha tenido en la mujer, cobra mucho sentido.

En muchos de los departamentos donde hacen presencia las dos locomotoras  (minería e infraestructura) de la emergente economía coorporativa, en el país. Son territorios donde más de medio siglo de conflicto armado no ha pasado sin dejar rastro. Tolima, Antioquia, Risaralda, Santander y Quindío. Bien haya sido por la histórica insurgencia. O por actores paramilitares conformados durante los 90’s. Donde las víctimas, han sido las comunidades habitantes de los territorios. Y acá es fundamental señalar como le ha tocado vivir la guerra a la mujer. Las violaciones sistematizas de sus derechos, pero también las vulneraciones físicas, emocionales y psicológicas de su cuerpo.

Desde el 2012 con la apertura a la posibilidad  de creer en la paz. Se lleva a cabo algunos cambios, sin embargo con consecuencias aún presentes del Gobierno anterior de Álvaro Uribe Velez. Una de ellas fue la bienvenida a la AngloGoldAshanti a las regiones del país. Pues en esta administración fue que se le adjudicaron títulos de concesión y exploración minera, como lo fue el de inicio al proyecto la Colosa Regional, quien no solo afecta a Tolima sino a mas regiones, como Quindío, Risaralda, Caldas y Antioquia. Puesto que esta explotación de oro que quieren hacer, afecta al cuerpo tierra pero también al cuerpo agua, esto con la construcción de hidroeléctricas para el funcionamiento de la extracción minera del proyecto Regional la Colosa. En este sentido vemos como existe relación en todos los casos encontrados en términos de las relaciones de las hidroeléctricas con la minería en el llamado “cinturón de oro”, territorio del proyecto la Colosa.

Por otro lado, hablamos de territorios, en que históricamente ha habido una concentración de la tierra que ha limitado el progreso Agrario de muchas regiones. Grandes extensiones destinadas para el monocultivo o para la ganadería. Impidiendo una distribución justa de la Tierra según su vocación. Y territorios donde existen comunidades indígenas con todo un legado ancestral y cultural donde la tierra es mujer y es madre. Y por eso no la pueden destruir. Movilizando de esta manera las acciones políticas, expresadas en la toma de conciencia, la movilización, la participación y la acción colectiva de mujeres y hombres que defienden el territorio en busca de una justicia social y ambiental de reconocimiento, pero también de distribución. Esto lo vemos con los procesos de exigibilidad y defensa como lo fueron las consultas populares recientes, en Cabrera y en Cajamarca. Considero que estos resultados corresponden a procesos de concientización frente a lo que implica tener una empresa minera que se apropie de los territorios.

El lugar de lo pedagógico y de los derechos humanos, fue clave allí. Pero también el resultado corresponde, a los niveles de organización que emprendieron las comunidades, y los movimientos sociales de jóvenes, campesinos, indígenas y mujeres siendo ellas un poco de todo esto. Que se empoderaron en la defensa del territorio. “mujeres siendo un poco de todo eso” Porque esa es la realidad del país, mujeres, indígenas, campesinas, afros, urbanas o rurales. Que configuran una identidad cultural pero también una identidad de clase, que se entretejen con otras formas de ser y de habitar el territorio.

Adicional a esto vale la pena nombrar que la identificación de los aspectos en los artículos variaba según el tipo de medio, y quien lo escribía. El espectador, el Tiempo, RCN radio, El Colombiano, Rebelión, radio Macondo y la crónica del Quindío. Son fuentes “informativas” que sacan diferentes caras a la noticia. Por un lado están los medios más hegemónicos en el país, propiedad de dos de los hombres más poderosos, los Santo Domingo y los Ardila Lule, pero que además tienen periodistas y columnistas académicos, u actores de la política. En otro lugar encontramos medios regionales o con menos impacto nacional. Y finalmente los tan necesarios medios de información alternativos, quienes hacen un valeroso esfuerzo por informar la verdad de la noticia. De esta manera entiendo que la noticia es contada de maneras diferentes, debido a los intereses de quien responde, o los intereses de quienes toca.

En algunos artículos se podía identificar más esto, como en el artículo del exalcalde de Medellín que escribe en el TIEMPO, una defensa para la EPM por verse involucrada en casos de corrupción. Dentro de sus argumentos se puede identificar que no pone en duda en ningún momento que esto no sea una mentira. Los términos empleados enaltecen la EPM y le da trascendencia como empresa pública indispensable en Medellín. Pues él en su administración destino muchos recursos para ella y para promocionarla en la especulación del mercado internacional. Menciona también el proyecto de infraestructura de Ituango, llamándolo “transparente”, sin embargo lo que no menciona es el impacto ambiental, social y cultural que está teniendo este proyecto. ¿Y cómo hacerlo? Como meterse con una de las firmas de infraestructura más importantes en Latinoamérica. También encontramos por esta línea el artículo de la entrevista que le hace el Espectador al presidente de la Asociación Colombiana de mineros, frente al tema de las implicaciones de la consulta popular, lo que él considera es que este mecanismo está permitiendo una “inseguridad jurídica” para la inversión en el país. Ya con esto en marca que él representa unos intereses económicos que van de la mano con la defensa de la minera de multinacionales en el país. En este sentido se dirige toda su entrevista, no está de acuerdo con las consultas populares y considera que estas se deben reglamentar de tal manera que no afecte la inversión.

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