El jardinero fiel

Panamá, 19 de marzo de 2015

Estimada Tessa Quayle,

Sean estás primeras palabras portadoras de felicitaciones por tu participación en la investigación sobre la empresa DYPRAXA, en Kenia, África. Admiro mucho tu carácter de encarar a cualquiera sin importar su poder, tu perseverancia para lograr tu meta, para poder salvar muchas vidas, quizás algunas de las cosas que tuviste que hacer fueron buenas pero parecían malas y aun así mantuviste tu frente en alto, defendiendo tus razones para hacerlo.

Es admirable la relación que construiste con tu marido, llena de confianza que no le importó que te criticarán, hubieran pruebas de cosas turbias aun así creyó en ti y lucho para terminar lo que tú habías comenzando, sabiendo que no le habías mentido y que todo lo que hiciste tenía una razón de poder que él debía comprender y entender. Me han enseñado que más allá del amor, que nos hace confiar y luchar hasta el final por defender a nuestra pareja, debemos darle el derecho de duda a cualquier persona, no creer en los primeros rumores que nos cuenten, sin tener pruebas verídicas o escuchar a esa persona.

Una de las cosas que más me impacto de ti, fue tu solidaridad con las personas de África, para enseñarles sobre el SIDA y ayudarlas a prevenirlo, educándolas y haciéndole las pruebas de detección, sin miedo a un contagio o discriminación a alguno que tuviese esta enfermedad, ayudándola a conseguir sus tratamientos y que pudiera seguir adelante. Fue interesante poder ver un poco más de cerca las estadísticas de esta enfermedad en un país donde gran parte de la población está infectada.

Muchas veces pensamos que la corrupción y la persecución se dan solo en la política o el narcotráfico pero nos mostraron, como el poder puede valer más que la vida de cientos de personas. Una compañía que estaba dedicada a fabricar los medicamentos para salvar muchas vidas, en realidad, no les importo matar a muchas personas, solo por dinero, beneficios personales y poder.

Espero que tu legado quede vivo por mucho tiempo, para que muchas personas podamos luchas en contra de la corrupción, y poder salvar muchas vidas, pero más que nada abramos nuestros corazones y podamos ayudar a millones de personas que están enfermas, principalmente de SIDA, educarnos y comprender que hay muchas maneras de convivir con estas personas y que podemos convivir y enseñar para evitarla, sin discriminación.

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