Administrador Financiero
Enviado por aydemaria • 20 de Febrero de 2012 • 1.556 Palabras (7 Páginas) • 1.532 Visitas
ETICA Y RESPONSABILIDAD
NATHALIA FIGUEROA MEJIA
YAMILETH VARGAS SALINAS
RUBIELA DURAN MORENO
AIDEE ACOSTA QUINTERO
DANIELA ANDRADE ALZATE
JONNIER ANDRES HURTADO MARMOLEJO
Corporación Universitaria Minuto de Dios
Administración Financiera
Florida –Valle del Cauca
2012
ETICA Y RESPONSABILIDAD
NATHALIA FIGUEROA MEJIA
YAMILETH VARGAS SALINAS
RUBIELA DURAN MORENO
AIDEE ACOSTA QUINTERO
DANIELA ANDRADE ALZATE
JONNIER ANDRES HURTADO MARMOLEJO
Trabajo elaborado para la Asignatura
ETICA Y RESPONSABILIDAD
Tutor:
Leyder Córdoba González
Corporación Universitaria Minuto de Dios
Administración Financiera
Florida-Valle Del Cauca
2012
LA PROSTITUCION DE LO ETICO EN NOSOTROS
LA ELECCION DE IVAN BOESKY
Este caso de acto ilegal no solo tiene un miembro que lo efectúo, sino también el que colaboro con la información privilegiada quien es el trabajador de la misma empresa y estamos seguros que así como él existen varios trabajadores que no actúan de forma ética en su organización quizá porque no se sientan comprometidos y debidamente motivados. Se le recomienda a la organización ofrecer un ambiente agradable de trabajo, una cultura organizacional armoniosa donde se refleje el compromiso de sus trabajadores con la empresa y las cabezas de la organización den el buen ejemplo de actuar en forma ética en diversas situaciones, ya que de esta manera los empleados tiene una dirección de sus acciones en la empresa.
La elección radical parte de nuestra integridad al elegir lo mejor, y lo mejor no es necesariamente aquello que nos traerá beneficios económicos ni poder sino aquello que va conforme a lo que en realidad va permitirnos estar tranquilos.
Algunas veces ciertas decisiones no son tan sencillas, elegir un bienestar conlleva sus riesgos y no siempre estamos tranquilos, el crecer implica sacrificio y dolor, y el crecer también implica esa conciencia de llevar una vida equilibrada y llena de buenas decisiones.
¿PARA QUE DEMONIOS HACEMOS ESTO?
Se basa en rumores, acuerdos y una tremenda especulación que hacen caer a los mercados y llevan a la bancarrota a compañías, mezclando ficción con hechos de la crisis financiera mundial. Esta vez, la diferencia es que los codiciosos son los bancos como instituciones, mucho más que apenas individuos.
(Caso Ivan Boesky) Boesky se aprovecho de la información privilegiada que le pasaba Dennis Levine para poder obtener un sustancial beneficio económico, a esto se le llama la elección radical (cuando la ética y el interés propio se ven afrontados, son los propios valores fundamentales los que están en juego), también existen las elecciones restringidas (se realizan desde el interior de un marco o conjunto de valores, los cuales se dan por sentados; la elección consiste en encontrar los mejores medios para lograrlo). En una elección radical podemos elegir entre diferentes formas de vida: una en la que el interés propio es lo primero, otra cuando lo es la ética o quizá optemos por un compromiso entre ambas. Todos afrontamos este tipo de decisiones, incluso en el caso que nunca sintamos la tentación de ganar $ de forma poco ética, tenemos que decidir hasta que punto vivimos para nosotros mismos y hasta que punto para los demás.
La codicia devalúa la vida en vez de edificarla.
Cuando el “más” se transforma en un deseo consumidor, puede perderse
contacto con la realidad. Muchas de las alegrías de la vida, aquellas que no pueden ser medidas por valores monetarios, pueden perderse en medio a la incesante búsqueda por bienes materiales. “Tales son las sendas de todo lo que es dado a la codicia, la cual prenderá el alma de sus poseedores”
La codicia destruye relaciones.
¿Qué valor usted atribuiría a una sonrisa amorosa, un saludo efusivo, un abrazo confortante o íntimo? Cuando nos permitimos ser oprimidos por la codicia y la búsqueda de “apenas un poquito más”, podemos no estar disponibles para recibir esos presentes que no tienen precio. “Alborota su casa el codicioso: mas el que aborrece el soborno vivirá”
La codicia distorsiona el objetivo.
La persona codiciosa pierde horas de sueño maquinando como sería adquirir más, mientras que deja de apreciar las alegrías y ventajas de dar, en vez de recibir. “Hay quién todo el día codicia; pero el justo da, y no detiene su mano”
La codicia decepciona al final.
Después de la muerte del hombre, que admitió querer “solo un poquito más”, le preguntaron a su consultor financiero cuanto el rico industrial había dejado. Respuesta: “Él dejó todo!” Si no podemos llevar nada con nosotros. Será que realmente vale todo el esfuerzo gastado para acumular tanto y apegarse a eso? “El Seol y el Abadón nunca se sacian; Así los ojos del hombre nunca están satisfechos
EL ANILLO DE GIGES:
Glaucon desafía a Sócrates, le plantea la historia
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