La Programación Neurolingüística como Herramienta del Coaching Empresarial

La Programación Neurolingüística como Herramienta del Coaching Empresarial

Cuando se escucha el término Programación Neurolingüística no siempre está asociada al coaching, sin embargo, según la doctrina debe ser considerada una de las herramientas de las que puede hacer uso el coach para lograr mejores resultados con el coachee. La Programación Neurolingüística es descrita como una nueva forma de aprender o acceder al conocimiento. En el caso del coaching, es deseable que el coach tenga acceso a esta herramienta a fin de enmarcar las sesiones con las mejores estrategias que la Programación Neurolingüística ofrece.

En el presente escrito se demostrará la importancia del uso de la Programación Neurolingüística en la práctica del coaching, cómo es que el coach con un adecuado entrenamiento puede ser capaz de que el coachee se abra y pueda enfocar las dificultades o circunstancias limitantes que tiene, de distinta manera. Es así que la Programación Neurolingüística es concebida como un medio para lograr alcanzar objetivos personales y direccionar la atención de la mente de tal forma que sea mucho más viable enfrentar ciertos temores. Además, es un canalizador de descubriendo de nuevos talentos, a veces desconocidos no sólo por el entorno del coachee, sino por el coachee mismo.

Según Ospina (2012), quien descompone el término Programación Neurolingüística, este sistema estudia la forma cómo se organiza y cambian las maneras habituales de pensar, comunicarse y comportarse para lograr los resultados deseados en nosotros mismos o en otras personas, a este aspecto se le denomina programación. Por otro lado, menciona que se ocupa de la forma cómo los seres humanos representamos la experiencia y cómo dicha experiencia es captada y procesada por los cinco sentidos, esto corresponde al componente neurológico del sistema. Finalmente, detalla que el elemento lingüístico hace referencia a cómo nos comunicamos con nosotros mismos y con los demás de manera verbal, no verbal y para-verbal, a la forma como esta comunicación es representada neuronalmente, codificada, ordenada y recibe significado. En esa línea de pensamiento, Ospina desglosa el término Programación Neurolingüística, como un sistema integral que estudia la forma cómo se organizan las ideas de los hombres, y cómo estos son capaces de modificar la forma en la que perciben el entorno, a través de una programación de los pensamientos, y su reflejo en un nuevo comportamiento. Naturalmente, la programación se lleva a cabo a fin de obtener mejores resultados en la calidad de vida.

Por otro lado, (Gessen & Gessen, 2002) citan a la psicóloga Jazmín Zambrano, quien concuerda con Ospina y, describe a la Programación Neurolingüística como un conjunto de técnicas destinadas a analizar, codificar y modificar conductas, por medio del estudio del lenguaje, tanto verbal, como gestual y corporal. Adicionalmente, Gessen & Gessen recuerdan los antecedentes de la Programación Neurolingüística, como un término que nació por iniciativa de John Grinder, un matemático y psicoterapeuta gestaltista. Su investigación se orientó en averiguar por qué unos terapeutas tuvieron éxito en sus tratamientos, descubriendo que ellos tenían en común una estructura o modo de actuar que les permitió el acceso a una serie de modelos de comunicación. De lo expuesto por los autores, se puede observar que el término nace a través de la identificación de un patrón de los tratamientos que ofrecían estos terapeutas, quienes lograron buenos resultados con sus pacientes, que fueron capaces de cambiar para su mejor provecho la percepción que tenían de la realidad. Según explican Gessen & Gessen, se llegó a la conclusión de que los hombres podían modificar sus valores, emociones y formas de expresión, de tal manera que consiguieran hacer frente a circunstancia difíciles con mejores recursos y mayor probabilidad de éxito.

Adiciona Alexa Mohl (2006), que con éste sistema los individuos pueden adquirir capacidades que nunca habían considerado que podían estar a su alcance; si el coachee lo desea, incluso puede modificar sus emocionales, cambiar conductas arraigadas o superar actitudes negativas. En ese sentido, el coach puede hacer uso de la Programación Neurolingüística durante las sesiones, muy especialmente si el coachee necesita enfrentar problemas que lo bloquean en su día a día, y por ende lo limitan en su relación con el entorno. Además, el coach puede capacitar a su coachee, aconsejarlo, y convertirse en su soporte, sin crear una relación de dependencia insana entre ambos. Una de las características que destaca Jaruffe & Pomares (2011), es que presenta un enfoque práctico y potente para lograr cambios personales debido a que hace uso de varias técnicas que se asocian entre sí para lograr una conducta deseada.

Al investigar la doctrina que existe sobre la Programación Neurolingüística, se ubican los presupuestos de los que parte esta teoría; los más importantes son: a) las personas tienen todo lo que se necesita para llevar a cabo los cambios deseados; b) el mapa no es el territorio, eso quiere decir que la experiencia humana se filtra mediante los sentidos, creando sistemas de pensamiento que no son reales sino una expresión y representación de la realidad particulares; c) las personas que poseen más alternativas tienen el control, cuantas más capacidades tenga la persona en todos los aspectos de la comunicación, más fácilmente conseguirán sus objetivos; y, d) no existen fracasos en la comunicación, sólo resultados, se trata de verlo todo en términos de experiencias y no de fracasos (Rodríguez , 1997). De lo anteriormente expuesto, se puede deducir que la Programación Neurolingüística considera al hombre capaz de modificar su propia realidad, de crear sistemas de pensamiento que construyen la realidad que se desea, y que la comunicación es un recurso del que se sirve para lograr sus objetivos. Se entiende entonces, que a través de la creación de una nueva perspectiva, el hombre es capaz de expresar a su entorno una actitud más positiva de cara a lo que desea conseguir, se muestra más seguro y convencido, y eso desemboca en mayor tasa de éxito.

En adición a los presupuestos de la teoría de la Programación Neurolingüística, ésta también ofrece varias estrategias de las que podría hacer uso el coach para entrenar al coachee. Una de las más usadas es la que se denomina anclaje, esta representa un medio de acceso a un estado de la conciencia, por lo general placentera o necesaria, para que el coachee pueda hacerle frente a determina situación incómoda o difícil de sobrellevar sin el ancla. De acuerdo a lo expuesto

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