La imaginación y el arte en la infancia. Lev Vigotsky.

La imaginación y el arte en la infancia. Lev Vigotsky.

Capítulo 1

Llamamos tarea creadora a toda actividad humana generadora de algo nuevo, ya se trate de reflejos de algún objeto del mundo exterior, ya de determinadas construcciones del cerebro o del sentimiento que viven y se manifiestan únicamente en el ser humano. 

• Dos tipos básicos de impulsos:

1. Reproductor o reproductivo: estrechamente relacionado con nuestra memoria, reproduce o repite normas de conducta creadas y elaboradas previamente o revive rastros de antiguas impresiones. La actividad no crea nada nuevo, se limita a repetir con mayor o menor precisión algo ya existente.

Tiene su fundamento orgánico en la plasticidad (propiedad para adaptarse y conservar las huellas de sus cambios) de nuestra sustancia nerviosa.

1. Creadora o combinadora: hace del hombre un ser proyectado hacia el futuro, crear y modificar su presente.

La psicología llama imaginación o fantasía a esta actividad creadora.

Existe creación no solamente donde se dan origen a los acontecimientos históricos, sino también donde el ser humano imagina, combina, modifica y crea algo nuevo.

Desde los primeros años de la infancia encontramos procesos creadores reflejados, principalmente, en el juego.

Capítulo 2

La actividad combinadora creadora no aparece repentinamente, sino con lentitud y gradualmente, de lo elemental y simple a lo complejo, depende de la experiencia acumulada.

Toda creación se compone siempre de elementos de tomados de la realidad, extraídos de la experiencia anterior del hombre.  De igual forma, la fantasía e imaginación siempre toman elementos de la realidad.

• Vinculación fantasía y realidad

1. Experiencia acumulada: La experiencia es el material con el que erige sus edificios la fantasía. La fantasía se apoya en la memoria
2. Combinaciones: No se limita a reproducir experiencias pasadas, sino que partiendo de ellas, crea nuevas combinaciones. Por consiguiente, está sometida a la anterior.
3. Enlace emocional: toda emoción tiende a manifestarse en determinadas imágenes concordantes con ella.

• Ley de la doble expresión de los sentimientos: todo sentimiento posee además de la manifestación externa, corpórea, una expresión interna manifestada en la selección de pensamientos, imágenes e impresiones.
• Ley del signo emocional: todo lo que nos causa una emoción coincidente tienden a unirse entre sí pese a que no se vea entre ellas semejanza alguna ni exterior ni interior.
• Ley de la representación emocional de la realidad: existe una vinculación recíproca entre imaginación y emoción.

1. Imagen cristalizada: Encarnación material, empieza a existir realmente en el mundo y influir sobre los demás objetos.

Capítulo 3

Al comienzo mismo del proceso creador encontramos siempre la percepción externa e interna que sirve de base a nuestras experiencias. Siguen un proceso de disociación, separar las partes del conjunto preferentemente por comparación unas con otras (unas se conservan en la memoria y otras se olvidan),  y asociación, agrupar más tarde los diversos elementos tal y como fueron percibidos.

• Disociación: sirve de base al planteamiento abstracto, a la comprensión figurada. El proceso disociador sigue el proceso de los cambios que sufren los elementos disociados. Condición necesaria para el juego.

Las magnitudes de la impresión real cambian de forma aumentado o disminuyendo sus dimensiones naturales.

• Asociación: agrupación de elementos, modificados y disociados.

El momento definitivo del trabajo de la imaginación es la combinación de imágenes aisladas ajustándolas a un sistema, encajándolas en un cuadro complejo.  Este proceso finalizara al cristalizarse.

Los principales factores psicológicos de los cuales dependen todos estos procesos aislados son la necesidad que experimenta el hombre de adaptarse al medio ambiente que lo rodea y el deseo (función inconsciente del cerebro).  En la base de toda acción creadora reside siempre la inadaptación. La psicología estableció una ley según la cual el ansia de crear se encuentra siempre en proporción inversa a la sencillez del medio ambiente.

Capítulo 4

La imaginación del niño no es más rica, sino más pobre que la del adulto; en el proceso de crecimiento del niño se desarrolla también su imaginación, que alcanza su madurez solo en la edad adulta.

En los adolescentes a partir de del despertar sexual se une el pujante impulso de la imaginación con los primeros embriones de la madurez de la fantasía, se apagan rápidamente los intereses infantiles y adquiere también forma definitiva la actividad de su imaginación. En esta transición a la adolescencia, por lo general, se pierde la afición al dibujo, y surge una nueva forma, doble, de la fantasía: la literatura; hay un apagamiento sucesivo de los momentos subjetivos y robustecimiento de los momentos objetivos. En este mismo tiempo se identifican dos tipos fundaméntelas de imaginación:

• Plástica (objetiva): emplea impresiones exteriores, construye con elementos tomados del exterior.
• Emocional (subjetiva): construye con elementos tomados de adentro.  

Capítulo 6

El niño pasa del lenguaje oral al escrito, éste último le resulta más difícil pues tiene sus propias leyes, diferentes a las del lenguaje hablado, y el niño no domina bien estas leyes.

Solo en los niños dotados se conserva la afición por el dibujo.

El arte literario domina sobre todo en el periodo de maduración sexual del adolecente. El despertar sexual destruye el equilibrio creado en los primeros años escolares, constituye una crisis interna de transición en el desarrollo del niño, que se caracteriza por el agudizamiento de y sobreexcitabilidad de los sentimientos. La destrucción del equilibrio anterior y la búsqueda de un nuevo equilibrio constituyen la base de la crisis que experimenta el niño al llegar a esa edad. El niño sustituye el dibujo por el arte de la palabra pues ésta le permite, mejor que el dibujo, expresar sus complejos sentimientos, especialmente de carácter interno.  

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