La naranja Mecánica ensayo. En el capítulo preliminar se nos habla de un mundo imaginario
Enviado por Niell Hyung • 24 de Noviembre de 2016 • Ensayo • 2.155 Palabras (9 Páginas) • 268 Visitas
En el capítulo preliminar se nos habla de un mundo imaginario, uno en el que las cosas no marchan como tienen que ser, donde la ficción se concibe así misma cómo un ser humano que no puede cambiar, que sea lo que sea, el destino que se le marqué, nunca podría cambiar. La ética nos señala que nuestro estilo de vida, y la manera en como reflejamos nuestras acciones tienen que ser verdaderamente realidad, un hecho que se percibe y no se conserva en nuestro yo interior. Éste, hermanos míos es el mundo en el que vivimos. Las doctrinas van y vienen, algunas dejan legado y otras no.
El hombre, por su capacidad, confunde el don que se le ha atribuido; el poder de crear, que con el tiempo se ha modificado por el concepto de destrucción. Es evidente que en una realidad, donde se busca enfrentar antes que resolver, la calamidad exista. Así como existen personas bondadosas, también hay mentes con anhelo de dañar. Ninguna persona ni psique es igual. La vida es tan efímera y tan vana, que hay una delgada línea entre el optimismo y el pesimismo, entre la esperanza y la desesperanza, entre la felicidad y la tristeza; que estos a su vez son valores. Como sabemos los valores tienen la característica de ser bipolares, esto se demuestra mucho en el libro. Para empezar, muchos de los problemas más grandes en la historia de la humanidad, han sido provocados por religiones, que se supone están allí para promover la paz. Cómo son lo suficientemente cínicos como para seguir provocando en la gente un daño terrible, y peor aún que las personas sigan creyendo todo. La doble moral se manifiesta de muchas maneras. Incluso en las instituciones políticas, organizaciones con un medio “bueno”, grupos sociales, etc.
“Y no lo creo porque, por definición, el ser humano está dotado de libre albedrío, y puede elegir entre el bien y el mal” (Burgess, 1962, p.xi). No es de extrañar que los valores tengan una objetividad y preferibilidad. Consiste en esa particularidad por la cual los valores atraen o inclinan hacia sí mismos la atención, las facultades y, en especial, la voluntad del hombre que los capta. Enfrente de las cosas, el hombre prefiere las que encierran un valor. De alguna manera siempre tiene que haber un balance en cualquier ser. Nada puede ser lo extremadamente bueno ni lo extremadamente malo como para existir y no ver las consecuencias de ellos. No se nos permite.
Cómo se nos habla en la teoría de la relatividad del ser; la esencia es todo aquello que se encuentra de nosotros y nos permite distinguirnos. Ciertamente lo mejor sería –si es que queremos un mejor mundo- que ese esencia siempre fuera positiva, y que se demostrara así como nuestra existencia, que como bien se nos enseñó, es la manifestación de nuestras actitudes y manera en como fuimos criados y nos hemos formado como personas a lo largo del tiempo. “Desgraciadamente hay en nosotros tanto pecado original que el mal nos parece atractivo” (Burgess, 1962, p.xi). Esto es algo muy interesante por recalcar, pues la manera en como llama al pecado, como si se tratara de algo que viene en nosotros por default, es lo que marca a este libro. El comportamiento de nuestro personaje principal, es de alguna manera la ética que ha decidido para su vida. Los tiempos sí que cambian, ahora muchos de los problemas, ante los mecanismos de control social que se nos implantan, ya no son dilemas para el desarrollo de la sociedad. Los medios comunicativos, en lugar de ayudarnos muchas veces nos perjudican y nos provocan mucho daño y un cambio irreversible.
Todo mundo busca desahogar sus problemas, evidenciar en el medio que se le proponga o facilite sus incógnitas. En este caso creo que el escrito ha propuesto por este medio el suyo. Y es que si, al principio parece un texto no apto para todo mundo, pero conforme pasa la lectura, te das cuenta que es un tema que debería de interesarnos a todos y de los cuales todos somos participes.
Los factores básicos para elaborar un pensamiento ético son: la libertad y la responsabilidad. Mi pregunta es ¿Realmente gozamos de liberta y responsabilidad? El objetivo de este libro y de nuestras en vidas en general podría considerarse como la llamada elección moral. La libertad es considera como el derecho que las personas tienen para elegir de manera responsable su forma para actuar ante la sociedad…Vivimos en un país donde la libertad es permitida hasta cierto punto, pero de una manera controlada. Es más factible que el libertinaje se conceda pero de una manera negativa. La libertad depende de las decisiones que tome el ser humano por si mismo. En cambio la responsabilidad, que muchas veces parece un valor muy difícil de poseer por el entorno social en el que vivimos, se encuentra en las conciencias de las personas, les permite reflexionar, administrar, orientar y valorar las consecuencias de sus actos. Este parece ser uno de los más completos, pero también de los más exiguos.
Así como se nos menciona que el lenguaje, la historia, la geografía, la fauna, el clima y en si todo va cambiando, también la visión que se tiene ante lo bueno y lo malo. Un elemento faltante dentro del libro es el llamado justicia, que como se nos mencionó no existe llevada a la práctica. Lo importante de este libro es llevar a la práctica el conocimiento y las reflexiones que se van realizando a lo largo de la lectura. ¿Es más importante cumplir un simple deseo y gozar –por un tiempo- de los juicios o delitos que te provocarán placer momentáneo. O es incluso mejor llegar a ser el superhombre que Nietzsche nos propone. Muchos de los mejores inventos y avances de la historia se dan justamente después de una gran catástrofe. La lógica de la vida no solo se refleja en los humanos, sino también en el tiempo. Le gusta el riesgo, vive en la finitud, cree en la esclavitud, ama la intensidad de la vida, no cree en el igualitarismo, crea valores ¿Es acaso esa definición digna de una historia de mitología?
Y como se nos habla de la libre elección que tenemos, que aplica para todo. Pues en este caso nos toca a nosotros como lectores decidir, si lo que aprenderemos aquí será de uso selectivo en nuestra vida o solo decretaremos escupir el conocimiento. Entonces
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