Las Emociones y su Influencia en la Sociedad

Las Emociones y su Influencia en la Sociedad

Mario Hernández Ollervides

Maestra: Priscila María Flores Sánchez

Grupo: 1207

Matrícula: 2775261

Tesis: Las emociones nos afectan a la sociedad humana en diversos ámbitos y situaciones que ignoramos, en las decisiones más importantes de nuestras vidas, y  nos afecta a gran escala  fisiológicamente a lo largo de nuestras vidas.

En este ensayo defenderé la importancia de las emociones en la sociedad humana, siendo estas uno de los procesos primarios cerebrales más importantes que rigen nuestra vida diaria, la mayoría de veces, sin que nos demos cuenta.

Refiriéndose en un sentido neurológico las emociones son solo líquidos cerebrales que viajan a través de él mandando señales que alertan al cuerpo acerca de alguna situación, por ejemplo cuando se vive algún momento de ira el cuerpo se moviliza para luchar, no para correr, y lo deja tembloroso, mientras las gotas de sudor corren por la frente, los músculos de la cara quedan rígidos en una expresión malhumorada y el corazón se acelera.

No tiene sentido que psicólogos y neurocientíficos ignoren estas cuestiones de proceso primario de nuestras mentes y se dediquen mucho más a procesos secundarios y terciarios que no tienen tanta influencia en nuestra vida. Las llaman “respuestas incondicionales del cerebro” que en realidad tienen mucha más relevancia durante varios momentos de nuestras vidas que otros procesos.

Es difícil establecer una definición totalmente acertada y clara de la emoción, tampoco existe un concepto científico de sus módulos o bloques, y la mayor parte de investigadores de los procesos emocionales los consideran como procesos adaptativos. Esto significa que alertan de situaciones importantes y motivan al individuo para tomar decisiones con el propósito de proteger sus intereses personales.

En los últimos años ha surgido un modelo científico de la mente emocional que explica cómo gran parte de nuestras acciones pueden ser dirigidas por nuestras emociones, y como las emociones tienen su propia lógica y sentido. Esto explica el porqué de la irracionalidad con la que las emociones frecuentemente se presentan.

        A la hora de reaccionar frente a diversas situaciones las emociones son mucho más rápidas que la razón y se ponen en acción sin detenerse a pensar en razones o reflexionar al respecto al instante. Esta rapidez, en la evolución, ha sido muy importante ya que obliga al ser a tomar decisiones mortales en milésimas de segundo. Es probable que los seres de genes de respuesta lenta no tuvieron mucha progenie a la cual transmitirlos.

La mente emocional, como se le llamará a las emociones durante el ensayo, formula acciones con una sensación de certeza lo suficientemente elevada como para, por ejemplo, matar a algún individuo si es necesario. Estas acciones normalmente no tienen mucho sentido dentro de la razón, ya que son una forma muy simplificada y sencilla de ver la situación. Durante o después de la acción de la mente emocional surgen cuestionamientos del porqué de estas, esto significa que la mente racional ha terminado de procesar toda la información dada por nuestros sentidos.

Esta forma de actuar del cerebro sacrifica el razonamiento complejo y la exactitud por rapidez, reaccionando al cuadro general, dependiendo solamente de las primeras impresiones. La gran ventaja de la mente emocional es que es capaz de asimilar la situación en un entorno emocional lo que proporciona la habilidad de percibir emociones en un instante por lo tanto genera juicios intuitivos de la situación, en quien debe confiar el individuo, en quien no, etc. Es prácticamente un radar de peligro, pero como estos juicios se hacen en unos pocos milisegundos pueden ser equivocados o falsos.

La respuesta dada por la emoción, aparte de ser rápida, es adaptable. Se demuestra por ejemplo al tener solamente unos pocos segundos de duración, el que su duración aumentara a horas o incluso meses, mostraría su poca adaptabilidad a diversas situaciones. Cuando persisten durante más tiempo, se convierten en estados de ánimo, una forma apagada de las emociones. No se presentan de maneras tan fuertes como las emociones haciendo que actuemos influenciadas por ellas.

La mente emocional es asociativa, significa que en cualquier situación que experimentemos, si hemos vivido alguna parecida, una reacción parecida se proyectará. Si la lógica de esta funciona así las cosas no necesariamente deben ser percibidas desde su identidad objetiva: está en cómo se perciben. Mientras que la mente racional da relaciones lógicas entra causa y efecto, la emocional da solamente  conecta cosas con características muy similares. Y entre más fuerte es la emoción más infantil se vuelve. Esto las convierte muy desatinadas en situaciones sociales.

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