RESUMEN CAPITULO 7 "TEORÍAS COGNITIVAS DEL APRENDIZAJE"

BREVE RESUMEN DEL CAPÍTULO 7  - “TEORÍAS COGNITIVAS DEL APRENDIZAJE”

(by  Juan I. Pozo)

LA TEORÍA DE EQUILIBRACIÓN DE PIAGET

        Siempre que se habla de las teorías psicológicas de aprendizaje se menciona a la obra de  Piaget sin embargo, este se ocupó en muy  pocas ocasiones de los problemas del aprendizaje. Pero este rechazo por  los problemas del aprendizaje es más terminológico que real; de hecho Piaget distinguía entre aprendizaje en sentido estricto y por el que se adquiere mediante información específica y aprendizaje en sentido amplio, que consistiría en el progreso de las estructuras cognitivas por proceso de equilibración.  Piaget considera que el aprendizaje del conocimiento específico depende por completo del desarrollo de estructuras cognitivas generales. Esta postura, con respecto a las relaciones entre aprendizaje y desarrollo niega cualquier valor explicativo al aprendizaje por asociación, ya que según él “para presentar una noción adecuada del aprendizaje primero hay que explicar cómo  procede el sujeto para construir e inventar, no solo simplemente como repetir y copiar.”        

         Esta posición conduce a un intento de reducir el aprendizaje asociativo a una situación especial de aprendizaje por reestructuración, reducción que tendrá importantes consecuencias para la teoría piagetiana. Para Piaget, el proceso cognitivo no es consecuencia de la suma de pequeños aprendizajes puntuales sino que está regido por un proceso de equilibración. De esta manera Piaget considera que el comportamiento y el aprendizaje humano deben interpretarse en términos de equilibrio.  Así el aprendizaje se produciría cuando tuviera lugar un desequilibrio o un conflicto cognitivo. Ante la interrogante de ¿qué es lo que está en equilibrio y puede entrar en conflicto?, en la teoría de Piaget, son dos procesos complementarios: la asimilación y la acomodación.

Según el psicólogo americano Flavell, la teoría piagetiana tiene por objeto explicar no solo como conocemos el mundo en un momento dado sino también como cambia nuestro conocimiento sobre el mundo. Ambos aspectos, el acto de conocer y el cambio en el conocimiento, en la teoría de Piaget asumen una posición constructivista  (al defender un constructivismo tan estático como dinámico).

        Utilizando una metáfora tomada de la biología Piaget afirma que “la asimilación es la integración de elementos exteriores a estructuras en evolución o ya acabadas en el organismo”. En términos psicológicos, la asimilación sería el proceso por el que el sujeto asimila la información que proviene del medio, en función de sus esquemas o estructuras conceptuales disponibles.

Ejemplo, en el test proyectivo de Rorschach, al margen de otras interpretaciones, puede darse una explicación piagetiana de la construcción (o proyección) de la respuesta. Aunque los sujetos se ven enfrentados a un estímulo carente de significado, asimilan ese estímulo a uno  de sus esquemas o conceptos disponibles: el concepto de murciélago o mariposa. De hecho, nuestro conocimiento procede así. El mundo carece de significados propios y somos nosotros los que proyectamos nuestros propios resultados sobre una realidad ambigua;  así conocemos, adaptando las cosas a la forma y el conocimiento de nuestros conceptos.

         Pero si el conocimiento se basará solo en asimilación viviríamos en un mundo de fantasías, las cosas serían lo que nosotros quisiéramos o pretendiéramos que fueran. Si únicamente existiera asimilación, gran parte de nuestros conocimientos serían fantásticos y conducirían a continuas equivocaciones. Por ello es necesario un proceso complementario que Piaget denomina acomodación. Gracias a él nuestros conceptos e ideas se adaptan recíprocamente a las características, vagas pero reales, del mundo. La acomodación no solo explica la tendencia de nuestros conocimientos o esquemas de asimilación a adecuarse a la realidad, sino que sirven sobre todo, para explicar el cambio de esos esquemas cuando esa adecuación no se produce. Es decir, si mis esquemas son  para asimilar una situación determinada, probablemente modificare algunos de mis esquemas, adaptándolo a las características de la situación.  Es así como Piaget define a la acomodación “llamaremos acomodación a cualquier modificación  de un esquema asimilador  o de una estructura, modificación causada por elementos que se asimilan”.  En los adultos  la adquisición de nuevos conceptos por modificación de otros anteriores  serían también un ejemplo de acomodación.

        Pero la acomodación supone no solo una modificación  de los esquemas previos  en función de la información asimilada, sino también una nueva  asimilación o reinterpretación  de los datos o conocimientos  anteriores en función  de los nuevos esquemas construidos. La adquisición de uno nuevo concepto  puede modificar toda la estructura  conceptual precedente.

        Según diversos intelectuales, un conocimiento recién adquirido sería como un alumno nuevo  que se incorpora a una clase cuando el curso ya ha comenzado. Dependiendo de las características del alumno  y del grupo al que se incorpora, su influencia sobre la clase puede ser  diversa: puede no relacionarse con sus compañeros, puede juntarse con algún grupo ya formado o puede ser un líder que revolucione toda la clase. Lo mismo sucede con los conocimientos nuevos: pueden consistir en un saber aislado, integrarse a estructuras de conocimientos ya existentes, modificándolas levemente o reestructurar por completo los conocimientos anteriores. Por lo tanto ambos procesos, asimilación y acomodación, se implican necesariamente. Según Piaget, el progreso de las estructuras cognitivas  se basa en una tendencia a un equilibrio  creciente entre ambos procesos. Cuanto mayor sea el equilibrio, menores serán los fracasos  o errores producidos  por las asimilaciones  o interpretaciones de las cosas. Pero también es importante destacar, que solo de los desequilibrios entre estos dos procesos surge el aprendizaje o el cambio cognitivo.

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