Testimonios desfasados de una Dimensión desconocida

Testimonios desfasados de una Dimensión desconocida

Todavía no es inusual encontrarse en Chile con la opinión que argumenta que para

avanzar como sociedad debemos “mirar al futuro” y dejar de lado “recriminaciones odiosas”

sobre el pasado cuando se hace alguna mención sobre la dictadura. De la misma manera, estas

mismas voces critican cuando generaciones más jóvenes se organizan para rememorar y

condenar las violaciones de los Derechos Humanos hechas durante esta época porque “eran

niños” o “ni siquiera habían nacido”. Todo esto no es más que un eufemismo que lo que

realmente desea es desechar los intentos de ejercicio de la memoria y rendirle homenaje a las

víctimas de la dictadura para negar la violencia acontecida.

Sin embargo, incluso si le diéramos cabida a esas peligrosas voces del olvido deliberado,

parece apropiado preguntarse: ¿Toda la producción relacionada con la memoria y la dictadura

busca solamente honrar —justamente— a las víctimas o además como sociedad hay algo

irresuelto que nos lleva constantemente a meditar y recordar esos años? ¿Es realmente una lucha

ajena a aquellos que vivieron en dictadura siendo niños o que incluso nacieron posteriormente a

ésta? En La dimensión desconocida (2017) de Nona Fernández se puede ver una clara

propuesta que responde a estas interrogantes: el trauma causado por la dictadura no afecta solo a

quienes fueron directamente víctimas del régimen, sino que también marca a todo el resto del

país que fue y sigue siendo testigo de la brutalidad de esos años. Tras los actos y memoriales no

Fulanito 2

existe solamente la intención de hacerle justicia a los afectados sino que también se esconde un

impulso de revisitar el pasado para comprender lo incomprensible.

Cathy Caruth, en su obra seminal sobre el trauma Unclaimed experience: Trauma,

narrative, and history (1996) localiza al trauma no en el evento violento original —que se

encuentra en el pasado— sino que en la no asimilación en el presente del suceso debido a que en

su momento no fue algo comprendido. Por lo tanto, el evento pasado siempre vuelve a acosarnos

en el presente (4). Esta concepción de trauma parece iluminar lo que se describe en la novela, en

donde la dictadura siempre vuelve en forma de recuerdos o de archivo. Pero más allá de esto, se

hace evidente también en que la narración de La dimensión desconocida se encuentra

frecuentemente cruzada por diferentes líneas temporales que se mezclan en la mente de la

narradora en donde el pasado se hace efectivamente presente. Un ejemplo claro de esto es la

escena cuando visita la locación del “Nido 20” —otrora centro de detención y tortura y hoy sitio

de memoria:

Me pregunto cuánto habrá cambiado este paisaje en todo este tiempo. Me respondo que

no mucho: entre el año 1975 y ahora sólo debe haber unas pocas diferencias. Yo soy una

de ellas. Desde mi presente que alguna vez fue el futuro de don Alonso Gahona,

imagino esa camioneta en la que fue raptado. (101)

En la cita se puede apreciar cómo, al igual que se invoca desde el presente al pasado,

también se imagina un pasado que se proyecta al futuro de éste, que es el presente de la

narradora. Esto también puede entenderse con lo trabajado por Caruth en otro de sus libros:

Literature in the ashes of history (2014). Aquí plantea que el estar vivo —o sobrevivir una

adversidad— significa ser testigo de la muerte y a su vez esto es algo que apunta hacia el futuro

en lo que sería la proyección del trauma mismo (9).

Fulanito 3

No obstante, La dimensión desconocida nos presenta un tipo de testimonio que nunca es

de primera fuente y que siempre está desfasado. La narradora construye recuerdos que no son

suyos utilizando en partes iguales información de archivo y su propia imaginación, donde incluso

llega a sentirse interpelada por el pasado a través de pantallas (154) y observada por fotografías

(105). La forma en que el pasado acecha a la narradora coincide con lo que se entiende como

trauma vicario, es decir, un trauma que afecta de forma indirecta a los testigos de una tragedia:

ella no fue torturada pero el habitar un país en donde los testimonios de tortura abundan cala de

forma

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