Agradecimientos Maestros

Estimada profesora:

El camino para llegar a la meta ha sido duro. ¡Cuántos desvelos! ¡Cuántas palabras he necesitado para elaborar mis escritos! Pero también ha sido un camino satisfactorio. ¡Cuántos momentos de romanticismo pedagógico! ¡Cuántos aprendizajes, presentes y ocultos, adquirí!

Y hoy, al umbral de un nuevo camino, en el que se mezcla la incertidumbre y la ansiedad, quisiera dirigirle unas cuantas palabras, pues sé que lo vivido en los momentos que pasamos a su lado, gracias a su experiencia, a su capacidad de reiventarse pero sobre todo, su tono humano–respetuoso, humilde, creativo, me permitirá llevar un sello, una marca, un poco de Usted en mí, y el camino que seguiré.

Gracias por valorar nuestras urgencias del presente y hacer de ellas un momento para el aprendizaje. Con ello no solo logré comprenderme, si no que me ayudó a comprender al otro y sus necesidades.

Gracias por hacernos sentir estudiantes universitarios, y no mera continuación de la escuela. Ese ambiente de horizontalidad y el respeto por nuestra naturaleza actual nos permitió asumir nuestras necesidades.

Gracias por promover ambientes de participación activa, constante y reflexiva en todos los momentos de aula y aún más, fuera de ella. Aprendimos que como estudiantes participar no se limita solamente a dar opiniones: fuimos constructores de los procesos de aprendizaje.

Gracias por tomar en cuenta nuestras experiencias previas en el proceso aprendizaje: al incorporar nuestra experiencias previas en el proceso de aprendizaje: al incorporar nuestras experiencias en situaciones concretas, nuestro aprendizaje fue significativo. Así pude valorar que lo que he vivido ha tenido importancia ya que me ha permitido acceder a otros conocimientos.

Gracias por hacer de sus clases momentos activos de construcción contínua de conocimiento. Estos procesos nos permitieron reflexionar sobre nuestra acción y de ahí modificar o mejorarla,

Gracias por respetar nuestra memoria selectiva. Siempre comprendiste que como personas adultas, seleccionamos y retenemos aquellos datos que tienen sentido práctico y útil para nuestras vidas. Así, tus evaluaciones eran procesos reflexivos acerca de nuestra acción confrontada con la teoría.

Gracias por facilitarnos nuevos conocimientos pero sobre todo, gracias por ayudarnos a que lográramos integrarlos a nuestras condiciones concretas.

Gracias por su respeto: a la diversidad, a nuestro estilo de aprendizaje. Siempre trataste de llegar a todos y todas con estrategias innovadoras. También nos quedó claro el proceso que vivenciamos, de lo concreto a lo abstracto, con el fin de hacer de nuestro aprendizaje un proceso de calidad.

En una época donde una mayoría critica la labor docente, este agradecimiento llega, ya que has impregnado en mí una forma distinta de hacer docencia, una docencia comprometida y distinta.

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