Inteligencia artificial: ¿Ayuda o peligro?

Inteligencia artificial: ¿Ayuda o peligro?

De seguro has visto películas sobre la IA (inteligencia artificial) donde la creación de ésta casi siempre termina como una amenaza para la humanidad, donde robocop enloquece y nadie es bueno para sus ojos, donde los robot se tornan contra de los humanos y nos vuelven su batería, donde el Dr. Octopus pierde el control de sus tentáculos los cuales buscan la destrucción de la ciudad, donde en terminator la tecnología avanza tan rápido que pierden el control de esta misma, pero ¿Por qué siempre vemos a la inteligencia artificial como algo malo? ¿Realmente una mente artificial buscaría nuestra aniquilación? Quizás pensamos que la IA va a ser un reflejo de nosotros mismos, y esa misma característica es la que provoca que veamos a la IA como algo malo, como algo negativo que nos genera temor y es porque nosotros somos así, estamos acostumbrados a la destrucción y a la violencia, hemos dejado de ser seres con moral, con criterio, con bondad y empatía, nos hemos vuelto incluso peor que el villano más malo de las películas y pensamos que las máquinas serán así, pero y ¿si no, y si las máquinas son una ayuda y su creación se vuelve el nacimiento de una era de mejoras y avances incluso más grandes de los que hemos creado hasta ahora?

El término “inteligencia artificial” fue creado formalmente en 1956 durante la conferencia de Darthmounth (Hanover, Nuevo Hampshire, E.E.U.U) , más para entonces ya se había estado trabajando en ello durante cinco años en los cuales se había propuesto muchas definiciones distintas que en ningún caso habían logrado ser aceptadas totalmente por la comunidad investigadora. La IA tiene como objetivo aprender más de nosotros mismos, pero a diferencia de la psicología y la filosofía, la IA está encaminada tanto en la construcción de entidades con una inteligencia superior como la comprensión de esta misma, esto nos genera dos enfoques diferentes del tema, el primero es concebir a la IA como el intento por desarrollar una tecnología capaz de proveer al ordenador capacidades de razonamiento similares a los de la inteligencia humana y el otro es la concepción de esta como investigación relativa a los mecanismos de la inteligencia humana que se emplean en la simulación de validación de teorías.

Uno de los pioneros dentro de estos enfoques es Hiroshi Ishiguro, un ingeniero de la ciencia que ha llevado a cabo los proyectos sobre la IA casi al extremo, con la creación de un robot a imagen y semejanza suya llamado Geminoid HI-1,  
este científico es uno de los primeros en lograr que el androide sea tan similar a un humano que sea casi imperceptible a primera vista, además de su gran capacidad de imitar las expresiones de un humano normal, sin embargo aún no es capaz de experimentar emociones por él mismo, aunque este no le es un impedimento para Hiroshi pues él señala que:

• "Nuestro próximo paso es intentar representar las emociones, la conciencia de los humanos, algo que no se define sólo con determinadas habilidades o cálculos, y que es muy difícil de imitar."

Es tanto el parecido del androide a un humano que el mismo Hiroshi  
asegura que cuando este proyecto esté finalizado nosotros con el tiempo nos terminaremos enamorando de los androides.

Hasta ahora hemos indagado la IA desde un lado más asiático y un poco menos ético que en américa, pero no toda la gente piensa como Hiroshi, también hay gente que se opone a esto y para sorpresa de muchos los mismos científicos e ingenieros son los opositores, un ejemplo de esto es el famoso Elon Musk, cofundador y director ejecutivo de las empresas de tecnología innovadora Tesla Motors y SpaceX, que en el Instituto de Tecnología de Massachusetts intervino declarando:

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