Un acercamiento a la Internet en Cuba

Trabajo de Aplicaciones Computacionales:

Yandry Fernández Perdomo, segundo año de periodismo

Un acercamiento a la Internet en Cuba

La investigadora Zuamy Campos Padilla realiza una reseña sobre la historia de la internet en Cuba^[1]. Explica que en septiembre de 1987, la materialización de un sistema de centros comunitarios en los Joven Club de Computación y Electrónica, marcó un momento significativo para la socialización de la tecnología informática en Cuba. Así en 1991, aparece Tinored, la red de los Joven Club, que en un breve lapso se convirtió en una de las más fuertes, con un gran número de usuarios y servicios innovadores. Otras de las redes emergentes en este período fueron Infomed, CIGBnet y RedUniv.

“Sin embargo, la conexión plena a Internet, en octubre de 1996, llegó acompañada de una política nacional contenedora de los usos, sujetos y sectores privilegiados en tan importante servicio. No obstante, este diseño no comprendía la integración de esta política de manera transversal en los programas de desarrollo -económicos, sociales y culturales- del país (Valdés, 2002)”, añade.

Sin embargo, luego más de dos décadas, en Cuba los problemas a Internet siguen siendo grandes. Cuba resulta uno de los países más desconectados, no solo de América Latina, sino del mundo entero.

En la investigación de Campos, explica que según la actualización de 2013 del Índice de Desarrollo de las TIC (IDT) (indicador que propone la UIT72 para “medir” la evolución de este tipo de tecnologías a escala global), es visible el estado de (des)conectividad de Cuba a nivel regional, pues solo Nicaragua se ubica debajo del puesto 111 alcanzado por la Isla, de un total de 157 países. La mayoría de los territorios en el rango inferior al promedio cubano, son generalmente africanos: Zimbabue (2.52), Kenia (2.46), Nigeria (2.18), Uganda (1.81), Angola (1.68), entre otros.

Tal dificultad es reconocida también por el documento emitido por el Ministerio de Comunicaciones llamado Estrategia nacional de banda ancha en Cuba. En dicho informe se explica que el índice de conectividad a internet en los hogares cubanos es de un 3.4% y el de las personas que usan internet es de un 25.7%.

En el acceso a Internet, también tienen énfasis “las limitadas inversiones en la

extensión de la red” (Elizalde, 2013) por parte del Estado y específicamente de la operadora nacional ETECSA. Más allá de estadísticas nacionales e internacionales, la realidad tecnológica de la Isla se debate en una paradoja.

Por una parte, confirma que más de la mitad de la población no ha tenido todavía contacto directo y frecuente, tanto con Internet, como con las redes nacionales. A la vez, se corrobora el elevadísimo índice de alfabetización y escolaridad, sobre todo en las actividades concernientes a la ciencia y la tecnología, sector donde laboran más de 65 mil personas, solo de nivel superior.

En un estudio del contexto actual el estudio de los nuevos espacios creados en la Isla para la extensión de la red de redes fue examinado por otra investigadora, en este caso, Silvia Oramas Pérez^[2] donde explica que el 24 de enero de 2013 ETECSA emitió una nota informativa que confirmaba que el cable submarino ALBA 1 estaba operativo y que se encontraba en un período de pruebas. El comunicado recalcaba las palabras de Boris Moreno, viceministro del MINCOM en aquel momento, que en 2010 explicaba refiriéndose al cable que cuando entrara en funcionamiento proporcionaría una mayor calidad en las infocomunicaciones, sin embargo, no significaría necesariamente una extensión de las mismas (Recio, 2013).

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