Una mirada al automóvil andino desde todos los ángulos

Una mirada al automóvil andino desde todos los ángulos.

SOCIO CULTURAL.

Dentro de la historia se menciona que este proyecto se inició en Ecuador en donde el orgullo de este país fue crear el primer auto ensamblado y diseñado dentro del territorio en donde su principal objetivo fue crear este vehículo para que contribuya al sector agrícola en las zonas rurales, en ese entonces se logró la construcción de 1000 unidades en donde intervino la comercialización en el mismo país y una parte en Colombia en dos diseños diferentes.

Para un país el desarrollo de proyectos de esta índole son de suma importancia ya que se establece un avance como territorio ya que se marca un antes y un después en la industria nacional del ensamblaje automotriz tener este automóvil en ese tiempo era un privilegio y sobre todo un orgullo el auto era llamado ´´ TRABAJO MANUAL DE LOS MILITARES´´ ya que en esa época el país era gobernado por un militar el general GULLERMO RODRIGUEZ luego de todos los servicios que se produjeron a lo largo de esa década y estableciendo la importancia que fue la fabricación del Andino y el beneficio que trajo consigo debemos rescatar que  durante el establecimiento de la distribución del auto no tuvo mayor acogida en el mercado nacional  pero se hizo historia  dentro de la incipiente industria ecuatoriana.

 EL PRIMER ANDINO AÚN SIGUE RODANDO.

Una nota de Diario La Hora, publicada el 24 de enero de 2012, bajo el título de “El primer Andino aún sigue rodando”, cuenta la historia sobre el primer Andino fabricado en el país que fue encontrado “en un pequeño garaje improvisado en medio de cultivos de pastos y alfalfa en una finca de Chambo, en Chimborazo se lo encontró bajo un techo de tejas junto a unos corrales de gallinas y de caballos árabes de pura raza”.
Su propietario, Antonio Ricaurte contó en esa nota y a su vez llamo a esta experiencia y especifico que el auto le parecía  “una verdadera pieza de museo, este personaje  “lo “salvó” de ir a una chatarrería tras un remate público, que fue organizado en 1976 por el desaparecido Patronato Nacional del Niño, adjunto a la Presidencia de la República que no tuvo interesados”.

Antes que se realizara este remate se comenta que el andino sirvió para las compras diarias del “rancho” o víveres de la Escolta Presidencial y posteriormente quedó totalmente abandonado en un canchón tras un incidente en una competencia automovilística en los bancos entonces como no existía ningún interesado pensaban en dejarlo de baja es decir que lo reduzcan a chatarra.

En su calidad de guardalmacén del Patronato, Ricaurte tenía prohibición de participar en el remate por lo que convenció a un conocido que adquiriera el automotor en la época en que la cotización del dólar se mantenía fija en 26 sucres el allegado de Ricaurte adquirió el Andino en 12 mil sucres”.

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