Adicción a los Videojuegos

La Adicción a los Videojuegos

Los videojuegos han logrado tener popularidad a lo largo de los años, inicialmente en la década de los 70, con la primera consola de videojuegos, tennis for two. Sin embargo, ha causado gran revuelo en los jóvenes y niños, incluso adultos, llegando al punto de depender de esos mundos virtuales.

Estas plataformas de juego han sido vistas y analizadas desde dos puntos de vistas diferentes; buena y mala.

Ventajas que aclaran que la manipulación y control de estos juegos aumenta la creatividad y la agilidad en ciertas cosas, tal como la facilidad de esquivar y prevenir accidentes leves. Pero también tiene sus desventajas, tales como, romper el equilibrio de la rutina diaria de la persona, volviéndose sedentarios y completamente adictos a la pantalla del televisor.

Una de las razones por la cual los chicos están tan obsesionados con estos aparatos podría ser porque, dentro de estos mundos, ellos se sienten útiles, siendo los protagonistas y los únicos capaces de salvar la tierra que ha caído en manos de un villano, volviéndose determinados al momento de enfrentar a esta extraña criatura y demás misiones que deben superar a lo largo de la historia. Algo verdaderamente excitante y entretenido para los niños. Mientras, por fuera de la pantalla, ellos son personas comunes, con trabajos y reglas que seguir diariamente, algo cansador y frustrante.

Los videojuegos podrían considerarse como una escapada de la realidad, los jóvenes pueden huir, dejando en segundo plano los problemas que frecuentan diariamente, las costumbres familiares y la socialización, porque sucede para ellos algo complicado de enfrentar y disfrutar, ya que es algo rutinario. Sin embargo, no se dan cuenta de que perjudican a los demás, a sus conocidos y familiares, provocando conflictos entre ellos e incluso la separación, mientras que el individuo se mantiene sentado, descuidando de su cuerpo y mentalidad, olvida su rutina y se mantiene en lo fantasioso, donde puede hacer lo que quiere, sin reglas ni sermones que recibir.

Por ello, los padres deben de poner ciertos límites al permitir a sus hijos el uso de juegos virtuales, imponiendo una hora determinada y asegurándose de comprar lo correcto para la mentalidad del niño.

El tema que acabamos de tratar, es importante para todos nosotros, porque nos recuerda que todo en exceso es malo y efectivamente una adicción es algo grave, si tenemos en cuenta las consecuencias que puede traer al estar centrado mucho tiempo en algo, como en una pantalla, que muestra una fantasía muy alejada de la realidad, además de que afecta la salud, especialmente al cerebro y ojos, que quedan completamente agotados después de un largo tiempo de funcionamiento. Debemos de cuidarnos y poner límites en todo lo que realicemos, porque nunca podemos saber entonces cuando terminaremos perjudicados por algo que no controlamos desde el principio.

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