Al comenzar el año...

Al comenzar el año propuse actividades para sensibilizar a los chicos y chicas con la ciencia. Dibujaron científicos y describieron su trabajo. Luego vimos varias notas y entrevistas a profesionales de la ciencia y al compararlos con los que habían dibujado, el estereotipo del científico loco perdió fuerza: los científicos y científicas son como nosotros. Bajo esa premisa comenzamos a investigar el primer tema: “Hidrósfera, el agua en nuestro planeta”

Este contenido fue planeado de esta manera ya que en el Diseño Curricular para el sexto grado, aparece el agua como material en interacción con otros materiales, sus distintos aprovechamientos, contaminación y el planeta tierra desde el punto de vista geológico. Estudiar la hidrósfera en forma más amplia, permitía abrir el juego para que el resto del año, sigamos analizando otros temas priorizando las relaciones que existen en la naturaleza.

Para empezar, vimos algunas enciclopedias de otros temas, las observamos y registramos algunas cosas que tienen todas en común.

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Una mañana en la biblioteca, propuse a los chicos realizar una toma de notas. Les leí un texto sobre la hidrósfera y ellos escucharon. Luego, en la segunda lectura, anotaron los datos que les resultaron importantes.

En una maraña de ansiedad y varias hojas aún limpias, empezaron a leer lo que habían podido escribir: algunos textos no se entendían, no se podía leer la letra, les preocupaba la desprolijidad; pero también hubo dibujos, palabras abreviadas y flechas. (…) Para la segunda toma de notas, ya no había tanta ansiedad.

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Durante dos meses leímos libros, vimos videos, discutimos (mucho), visitamos páginas como la de Aysa o Acumar, aprendimos a usar el Google Earth, hicimos dibujos.

Con cada nuevo título que se agregaba a la enciclopedia, los chicos fueron adquiriendo autonomía en la investigación, afinaron las estrategias para buscar información en internet y comenzaron a compartir los datos con su grupo.

(…) Con tanto conocimiento dando vueltas, darles una hoja y que reproduzcan lo que dice la fotocopia me parecía muy poco (…) Entonces, me armé de coraje –y paciencia- y arrojé estrepitosamente: “Objetivo: el agua debe entrar sucia por un lugar y salir transparente por el otro (aunque no sea potable). Condición: no se pueden usar químicos.

Luego sólo me dediqué a pasar por los grupos y disfrutar de sus peleas. Sí, peleas – que hubo que apaciguar- por diseñar el mejor dispositivo. Mis intervenciones tuvieron que ver con que garantizaran que pudieran traer los materiales que estaban pensando y preguntas sobre el funcionamiento de los dispositivos. (…) De formas diferentes, en todos los grupos aparecía la idea de hacer algo en etapas, que el agua atravesara “cosas”, y esta fue la primera conclusión a la que llegamos: hacía falta usar filtros.

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