Arquitectura Sustentable

Arquitectura Sustentable

Desde hace décadas, la ecología y la sustentabilidad son corrientes de gran influencia en nuestra sociedad y abarcan todos los ámbitos de nuestra vida. En el campo de la arquitectura se están realizando cambios y avances importantes, pero la realidad nos dice que aún no son suficiente. El porcentaje de edificios sustentables es todavía reducido, y esto topa con un aumento en la construcción en casi todas las partes del mundo. Solo en el campo Ed la arquitectura residencial ya se produce un incremento del parque de viviendas derivado del crecimiento de la población y, en consecuencias, se origina también un mayor consumo de materias primas y se elevan los costes ambientales del transporte.

Todavía es necesaria mucha más colaboración por parte de todos los implicados, desde arquitectos y constructores hasta fabricantes de materiales y clientes finales, si lo que se pretende es conseguir una construcción de calidad que, además, sea ecológica y sustentable.

A continuación se presentan algunas explicaciones breves sobre las bases de la bioconstrucción y los criterios verdes que pueden aplicarse para la construcción de una vivienda saludable con materiales ecológicos, renovables, climatizados con energía solar, geotérmica o iluminación de forma natural.

• Los espacios diseñados en forma eficiente requieren menos energía.
• Equilibrar la estética del diseño con la energía incorporada.
• Usar materiales rápidamente renovables. (Las láminas de bambú contrachapado se pueden plegar para minimizar el tamaño en los desplazamientos).
• Las paredes de vidrio son una buena opción ya que luz  impregna los espacios sin ventanas y reduce las necesidades energéticas de iluminación artificial.
• Utilizar y valorar los recursos y servicios renovables; la madera puede usarse como materia prima renovables, debido a su balance energético positivo.
• Utilizar tecnología sencilla en pequeñas cantidades y soluciones de baja energía.
• En un diseño sustentable es importante comprender y conocer el entorno y mostrarse responsable frente a las condiciones locales.
• Un tejado que se extiende más que el interior proporciona una sombra y ayuda a evitar el uso de aires acondicionados.
• Construir tan ligero como sea posible. Cuanta menor sea la cantidad de material empleada, más sostenible será el edificio.
• Reutilizar las reservas de materiales de construcción.
• Utilizar materiales cuya fabricación tenga un impacto ambiental mínimo.
• Incorporar paneles solares, aparatos de eléctricos, calentadores de agua y dispositivos de iluminación de bajo consumo energético.
• Reciclar edificios en lugar de demoler.
• Diseñar bien los edificios e modo que se utilicen correctamente y no queden obsoletos a medida que cambian las necesidades del cliente.
• Recoger toda el agua de lluvia y utilizarla para el jardín y las cisternas de los cuartos de baño.
• Fomentar la vida en el exterior.
• La vegetación debería tener un papel significativo  en el diseño arquitectónico, ya sea estético, como refrigeración activa de los edificios, así reducen la necesidad de aire acondicionado, además de que purifican, humidifican y oxigenan el aire. Además añaden un efecto psicológico.

Los materiales ecológicos ofrecen beneficios medioambientales y de salud que los materiales tradicionales no suelen proporcionar. Su producción y utilización implican un menor consumo energético y de recursos naturales, y menos contaminación. En general son menos tóxicos para el planeta y sus habitantes.

Las decisiones de diseño pueden resultar cruciales para eliminar o reducir la basura. La adquisición de materiales con un embalaje mínimo (o retornable) reduce los desechos, así como unas especificaciones correctas al momento de pedir los materiales. Podemos reutilizar el suelo excavado para ajardinar otras zonas. Al utilizar esta filosofía desde el principio, la gestión de residuos cambia de forma drástica y se simplifica.

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