Beuchot. La hermenéutica analógica.

La hermenéutica analógica

Beuchot

La hermenéutica analógica es un intento de recuperar la antigua noción de analogía que comienza con los pitagóricos para seguir con Platón, Aristóteles, la Edad Media y estar a punto de perderse en la modernidad.

Gadamer, hace un intento de recuperación con la frónesis o prudencia que es sumamente analógica; por su parte Ricoeur hace una utilización explícita de la analogía al hablar del símbolo, la metáfora y del sí mismo como otro.

Analogía

Significa proporción, proporcionalidad, no mera semejanza. Aunque es participe de la semejanza, la analogía participa más de la diferencia que de la identidad, colocándose entre lo univoco y equivoco. Involucra cierto empobrecimiento del significado, pero alcanzando el significado suficiente.

Hermenéutica Analógica

Con Aristóteles, la analogía estaba muy conectada con la frónesis, la cual era la analogía puesta en práctica, proporción hecha vida. Al tener la hermenéutica la estructura de la frónesis, de hecho, posee una estructura analógica, lo cual nos muestra la estrecha relación entre la hermenéutica y la analogía, y, por ende, la conveniencia de juntarlas.

En la filosofía del lenguaje se habla de una triple significación: la univoca, la equívoca y la análoga.

La significación unívoca es clara y distinta, completamente rigurosa y objetiva. Ésta admite solo una interpretación del texto, tomando como falsas todas las demás interpretaciones.

Por su parte, la significación equivoca es totalmente dispersa, irreductible, subjetiva y oscura. Admiten casi todas las interpretaciones de un texto como válidas.

En cambio, la significación analógica llega a la comprensión, la univocidad es tan solo un ideal regulativo para ella, en la lejanía, al límite. No renuncia a toda objetividad; tiende a ella, la procura, pero siempre con la advertencia y la conciencia de que es inalcanzable, de que va a predominar la subjetividad. Tiene la apertura que deseaba Gadamer, pero sin perder la seriedad a la que aspiraba Ricoeur.

La hermenéutica analógica admite varias interpretaciones, todas tienen su proporción de verdad. Establece una jerarquía en las interpretaciones, de modo que una sea más rica que la otra.

La hermenéutica analógica ayuda a compaginar la metáfora y la metonimia, pues ambas formas son suyas, sus dos polos. De esta manera se evita el que solo se de una interpretación metonímica propia de la ciencia o una interpretación metafórica, propia de la poesía. Tiene la capacidad de equilibrar la interpretación sintagmática (horizontal y superficial) y la paradigmática (vertical y en profundidad, cala hondo.

La interpretación analógica nos permitirá privilegiar el sentido sin renunciar a la referencia.

Una hermenéutica unívoca privilegia de modo excesivo la referencia mientras la equivoquista

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