Primeros pasos para la erradicación del hambre en Huehuetenango.

Primeros pasos para la erradicación del hambre en Huehuetenango

En consecuencia al hambre que azota año tras año en el departamento más afectado del país, se han presenciado una serie de iniciativas para contrarrestar dicha problemática, alguna de ellas son:

La implementación de programa “hambre cero”, esto a base de una visita que realizó el ex mandatario Otto Pérez Molina al municipio de Atitán en el año 2012. Este programa consiste en articular esfuerzos, planes y proyectos en materia de seguridad alimentaria representantes de los sectores académico, político, Directores de Medios de Comunicación, voluntariado, ONG nacionales, empresarial, diplomático, Ministerios y Secretarías de Estado, pueblos indígenas, mujeres, Iglesia Católica, Alianza Evangélica, campesino y sindical. Esto con la finalidad de reducir hasta un 10% la desnutrición crónica en un lapso de 4 años, sin embargo no se mostraron resultados concretos al finalizar el proyecto.

Luego en el año 2014, el departamento recibe una atención especial por parte de la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional (SESÁN), esto debido a una cambio drástico en el clima que acababa con los cultivos. Es armada una estrategia con el fin de proveer fuente alimenticia la cual se ejecuta a principios del 2015 en el cual 1 mil 800 familias recibieron su dotación de víveres, consistente en 25 libras de frijol, un quintal de maíz, azúcar, incaparina, sal, arroz, fideos, aceite y huevos. La ayuda proviene de Departamento de Ayuda Humanitaria y Protección Civil (ECHO), por medio de transferencias de dinero en efectivo y cupones canjeables por alimentos, estos fueron entregados durante 90 días. Se realizó a través del PMA, en coordinación con el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), y la SESAN.

El dinero en efectivo y los cupones fueron distribuidos entre quienes participaron en actividades de creación de activos para ayudar a reconstruir sus medios de subsistencia. Estas incluyeron la conservación de suelos y agua, mejores prácticas agrícolas y capacitación para hacer frente a los fenómenos naturales, así como el fortalecimiento de los sistemas de vigilancia para la alimentación y la nutrición.

En marzo del 2016 se dan a conocer los resultados del plan creado por Pérez Molina el cual en vez de disminuir hizo un aumento en la desnutrición en el transcurso de los 4 años vigencia de este plan donde fueron invertidos alrededor de 148 millones de quetzales, porcentajes mostrados por Herberth Ralda, jefe del Área de Salud de Huehuetenango. Ralda toma acciones como la entrega de micronutrientes a mujeres embarazadas y el abordaje de los recién nacidos en las primeras 24 horas de vida impacte de manera positiva en este indicador. Además, el viceministro Rodolfo Zea anunció la puesta en marcha de un nuevo modelo de atención primaria en salud que podría apoyar a pobladores de la provincia, en este plan se prevé reorganizar al personal contratado por el Ministerio de Salud y ubicarlo en regiones abandonadas de la provincia.

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