¿Qué es ética?.

¿Qué es ética?

El concepto de “bueno” o “malo” es un tema controversial en cualquier ámbito, situaciones que en una cultura pueden ser cotidianas, en otra pueden verse como cosas incorrectas o incluso causar conflictos, dado que el contexto es distinto. Como cualquier disciplina humana, la ética ha tenido un estudio subjetivo en cualquier sociedad, sin embargo, el común denominador en todas sus concepciones es el estudio del comportamiento humano y su impacto dentro de la sociedad en la que se desenvuelve.

La ética emplea palabras que condicionan el accionar de las personas hacia determinadas situaciones en un determinado contexto, lo correcto y lo incorrecto, lo que se debe y lo que no, lo que se puede y lo que no, lo que se ve bien y lo que se ve mal… Y un sinfín de términos y expresiones sobre lo que moralmente define la armonía social, y a pesar de que no impone sanciones al no ser restrictiva, la ética tiene una gran influencia en el pensamiento humano y, por ende, en sus acciones.

Para ejemplificar lo anterior podemos pensar en varias situaciones de honestidad, congruencia u omisión, donde las personas se escuden en la comodidad que tienen, pretendan sacar provecho ante alguna circunstancia o incluso en obtener lo que buscan a costa de otros o de la explotación irresponsable de los recursos disponibles. Para ello, es importante la búsqueda constante de mecanismos para tratar de imbuir a las personas los valores que acotarán las posibilidades hacia aquellas que fomenten relaciones sanas, ya sean personales, familiares, organizacionales, sociales o con el medio en general.

La ética apela a los valores y exige una amplia capacidad de análisis a una determinada situación desde un enfoque humanista más allá del campo en donde se esté aplicando, es decir, para dos personas viviendo bajo el mismo contexto el concepto del bien común debiere ser el mismo independientemente de la actividad que realicen. Lo anterior nos lleva a dilemas, los cuales son situaciones a resolver de las que no sólo nos hacemos responsables de nosotros mismos, sino de tomar decisiones que no afecten a terceros. Los dilemas nos pueden llevar a conflictos que impliquen reflexión y discusión, pero los valores éticos encauzan nuestras decisiones hacia el bienestar de todos los involucrados o cuando menos a la no afectación de ellos.

Es importante notar que a pesar de la existencia de leyes que cuiden la justicia en una sociedad, es la ética la que restringe la forma de convivencia para que dicha justicia se conjugue con armonía, y de esta forma que cada individuo pueda ejercer su rol y construir su vida acorde a sus expectativas y metas, pero siendo congruente con sus valores y responsable con su entorno.

Finalmente, cabe mencionar que debido a la exposición mediática en la que estamos inmersos es muy común vivir inconscientemente entre prejuicios, miedos e ideas de otros ámbitos,

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