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Monografia Del Eternauta


Enviado por   •  11 de Febrero de 2012  •  4.428 Palabras (18 Páginas)  •  2.438 Visitas

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MONOGRAFÍA

LENGUA Y LITERATURA

ETERNAUTA II

2011

INTRODUCCION:

En esta monografía analizaremos la relación que tiene el Eternauta II, escrito por Hector Germán Oesterheld, con la política. Esta historieta fue escrita en el año 1976, cuando comenzó el periodo de dictadura militar, que se prolongó hasta el año 1983, con la elección democrática de Ricardo Alfonsin. Durante ese periodo, se prohibió la libre circulación de los libros que no estuviesen alineados al pensamiento de los militares y Oesterheld (junto con Solano López, el dibujante) se las ingenia para denunciar los actos de los militares a través de la historieta.

Pero la forma en que Héctor Germán planteo su pensamiento permitió que se pueda publicar este libro: “No son nada sutiles las referencias a la realidad que hace Oesterheld a través de la ciencia ficción; sin embargo, la publicación no fue censurada, lo que hace presumir que no fue atendida o entendida por los militares”(1).

DESARROLLO:

Como dijimos en la introducción, El Eternauta tiene además de un sentido de recreación, su lado político. Además de los personajes, analizaré los hechos y la cronología de los mismos para ver comprobar la existencia de una denuncia política en la historieta.

La imagen de Juan Salvo

El personaje principal es Juan Salvo y a él se lo puede relacionar con el pensamiento de la gente y no con una persona en especial. Salvo se caracteriza por ser una persona rebelde, era aquel que no le gustaba estar bajo el mando de nadie y menos si este se lo obligaba, por eso es él quien se encarga de organizar toda esa rebelión en contra de los “ellos”. A este personaje se lo ve reflejado en lo que las personas de esa época querían y necesitaban, que era estar bajo un gobierno democrático. Es por eso que también se lo consideraba a una Juan Salvo como un representante del grupo Montoneros: “Este nuevo Eternauta es un héroe mítico, que encaja dentro de la mitología montonera. El Eternauta ha pasado a ser el héroe montonero que no existió en la realidad […] En varios de los enfrentamientos, Salvo no ha evitado la muerte de algunos de sus aliados en función de un cálculo de que era necesario que perecieran para lograr el triunfo” (2).

Lo que también inspiraba a la gente de esa época y a la gente actual de La Campora es que nuestro héroe contemporáneo, Juan Salvo es un ciudadano común y corriente que ante la amenaza y el peligro supo reaccionar de manera eficiente, audaz y con valentía.

En Juan estaba la única posibilidad de salvar al pueblo de las cuevas: “La clave se encuentra en que el Eternauta ha desarrollado superpoderes extrasensoriales –puede, por ejemplo, percibir la llegada del enemigo con anticipación- y su fuerza física ha adquirido proporciones extraordinarias. Ha adquirido la fuerza necesaria para tener posibilidades de enfrentar al invasor. Germán es arrastrado y utilizado por el Eternauta en sus planes. La mayoría de las veces sin recibir explicaciones sobre por qué tiene que hacer lo que se le ordena.” (3). Esta última oración deja bien en claro que Juan, ahora no es más Juan sino que es El Eternauta y asume su rol de líder y comienza la resistencia contra los invasores.

Además, Germán plantea la necesidad de que la Argentina necesita de un héroe que dedique su vida a defender la libertad y este siempre pendiente al cuidado de los que no se pueden defender: “Juan Salvo deja de serlo para convertirse definitivamente en el Eternauta” (4). Este héroe deja de ser el padre de familia, dueño de un chalet en Vicente López para convertirse en el salvador de los pueblos de las cuevas (es decir, de la Argentina).

También podemos conocer un nuevo lado de Juan, que en la primera edición de 1959, no habíamos visto: Ahora tiene la capacidad de la rápida toma de decisiones y no duda ante la emergencia y jamás pone su beneficio o interés personal por sobre la seguridad de la gente de las cuevas; siempre puso a ellos por sobre su vida y la de su familia. Juan no es el mismo de antes, ha desarrollado la forma de actuar mas rápida y mas eficazmente: “El Eternauta ha adquirido poderes para funcionar en la historia como un vanguardista iluminado que siempre tiene la razón y a quien no queda otra posibilidad que obedecer y seguir; emite órdenes y exige que los demás obedezcan.” (5)

La imagen de Héctor Germán Oesterheld

El autor en el libro viaja en el tiempo con Salvo y se transforma en su mejor compañero, y durante la aventura debe sacarlo en mas de una ocasión de un aprieto. En otras ocasiones, parece como si Juan no tuviese tiempo de cargar todo el tiempo con Germán ya que este lo único que parece hacer es demorarlo y atrasarlo. Como mencionamos antes, en esta nueva edición, la figura de nuestro héroe cambia y por eso Oesterheld a veces no entiende sus planes o su metodología y protestaba pero luego terminaba entendiendo que a veces hay que tomar decisiones que aunque nos duelan, es lo correcto (¡Decidiste bien Juan… sólo que duele tanto!...). No hay que dejarse llevar por los sentimientos durante la guerra, hay que ser fríos y duros como una roca. Oesterheld no pudo, ni tampoco pudo cualquier otro hombre, pero Juan si pudo. Él entendió cual era su lugar y cual era su tarea y la cumplió: salvó al pueblo de la opresión y la muerte. Germán en un momento se decepciona con las decisiones que tomaba Juan y sentía que él ya no valoraba la vida, pero por el contrario, estaba haciendo todo lo posible para que prevaleciera la vida del pueblo y cuando conoce a María, Cosme, Cascote y a Resorte, su vida cambia porque cuando llega a ese tiempo no tenía a nadie por quien luchar pero al conocerlos, tiene por quien luchar porque el amor que siente es como si fuesen padre e hijos. Esta relación que se establece y encontrar la razón por que luchar se los puede asociar con la gente que no sabia que hacer pero que encuentra algo porque resistir y luchar por sus derechos: “el Ello está terminando de construir una nave para abandonar la tierra, necesita "plasma" para producir combustible, y exige -como tributo- que los hombres de las cuevas le entreguen un elevado número de jóvenes para ser utilizados y sacrificados en la preparación de aquél. Esto se publicaba en el mismo momento en que miles de jóvenes eran asesinados en Argentina.”(6). Por eso

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