Emprender También Es Cuestión De Planear

Emprender también es cuestión de Planear

(Joaquín Guzmán Barrios)

Revisando la definición de Emprendedor, se puede resumir el concepto como aquella persona que está dispuesta a asumir un riesgo de tipo económico en el momento en que identifica una oportunidad en el mercado y decide administrar (planear, organizar, dirigir, coordinar y controlar) los recursos necesarios para capitalizarla y obtener beneficios a partir de esto.

De acuerdo con lo anterior, se puede notar cómo la diferencia clara entre un emprendedor y empleado, es la decisión que toma el primero de correr el riesgo de dejar la estabilidad de un escritorio con un cheque fijo cada fin de mes y lanzarse a conquistar una idea. Por otro lado y como bien es sabido, el riesgo es una variable presente en toda elección que si bien no puede eliminarse, si puede minimizarse a través de distintas herramientas como la planeación, los seguros o la diversificación entre otros, lo cual no es muy común que pase por la cabeza de muchos emprendedores y que de un modo u otro puede llegar a ser el factor crítico de éxito, es decir la supervivencia misma de la nueva empresa.

En el foro de emprendedores del sábado 6 de Agosto, muchos de ellos dieron su punto de vista al respecto y contaron sus experiencias como creadores de empresa. Dentro del grupo hubo como común denominador (con contadas excepciones) la apreciación de que emprender es muy difícil y que no existe mucho apoyo para las nuevas ideas, lo cual puede ser bastante discutible si se toma como punto de partida el hecho de que el pequeño empresario colombiano no realiza una correcta planeación estratégica de su negocio, lo cual es el primer gran error puesto que de ahí en adelante no contará con un norte definido para su organización. Al momento de emprender no es suficiente una buena idea, sino una correcta planeación para minimizar los diferentes riesgos que se encuentran en el día a día.

Si bien emprender un nuevo negocio no es fácil, tampoco puede estigmatizarse como un largo camino de por lo menos tres años iniciales de sufrimiento, puertas cerradas y noches largas de no dormir. A través de una correcta planeación previa del negocio, el contar con socios, aliados estratégicos, proveedores clave y un concepto diferencial que permita hacer las cosas de manera innovadora y diferente a la competencia, se puede llegar a crear la mezcla perfecta para que cualquier persona tenga el camino preparado y evitar así muchos tropiezos.

En definitiva, emprender no es solo una cuestión de actitud y mentalidad, es también una actividad que debe estructurarse muy bien, al igual que las compañías “veteranas” en el mercado lo hacen año a año con el fin de alcanzar objetivos y metas claras que puedan ser medidos en el tiempo y que permitan al emprendedor ver los frutos de su planeación estratégica,

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