Aimé Césaire: colonialismo, comunismo y negritud
Enviado por Juno Beat • 28 de Marzo de 2017 • Apuntes • 1.629 Palabras (7 Páginas) • 295 Visitas
Aimé Césaire: colonialismo, comunismo y negritud Immanuel Wallerstein
Césaire fue principal defensor de la departamentalización de la Martinica y otras tres colonias francesas; después fue elegido en el Partido comunista francés permaneciendo en ese puesto más de 50 años; dos años después se crearon el Partido Progresista Martiniqués. Y Césaire recorre los tres grandes temas de su trayectoria vital: el colonialismo contra el que combatió durante toda su vida; el comunismo al que se adhirió por un tiempo y que abandono de una forma tan notoria; la negritud, que entendía como una forma crucial de combatir el colonialismo y que fue quizá elemento clave de su ruptura con el comunismo.
Césaire exigía la departamentalización en Martinica, siendo que llevaba varios años siendo una colonia francesa, los ciudadanos querían convertirse en ciudadanos franceses de pleno derecho, con todas las ventajas de los residentes en la Francia metropolitana. Y consiguió la departamentalización, ya que para ella fuera una idea más social que política, pues lo que querían el martiniqués en su conjunto era, salarios equivalentes a los de los franceses de Francia y las leyes aplicadas en Francia. Llamando la atención, no con un análisis de los efectos del colonialismo sobre los colonizados, sino de efectos sobre los colonizadores: y estudiar como la colonización trabaja para descivilizar al colonizado.
La negritud ha sido una rebelión contra lo que yo llamaría el reduccionismo europeo. Césaire nos ofrece una clara vía para analizar las relaciones entre el colonialismo, comunismo y negritud (o más en general la afirmación de la identidad cultural) demandando los derechos iguales de múltiples formas y realidades culturales a existir.
Vayamos al fondo de la mentira principal ¿Colonización y civilización? En donde la colonización el gesto decisivo es el del aventurero y del pirata, el del tendedero o a lo grande y del armador, el del buscador de oro, y el del comerciante, el del apetito y el de la fuerza, con la maléfica sombra proyectada desde atrás por una forma de civilización que en un momento de su historia se siente obligada, endógenamente a extender la competencia de sus economías antagónicas a escala mundial. Y estudiar como el colonizador trabaja para descivilizar al colonizador, para embrutecerlo en el sentido literal de la palabra, para degradarlo para despertar sus recónditos instintos en pos de la codicia, la violencia, el odio racial, el relativismo moral.
La generación de las razas inferiores o convertidas en bastardas por las razas superiores esta en el orden providencial d la humanidad. El hombre del pueblo es casi siempre, entre nosotros, un doble desclasado, su pesada mano esta mejor hecha para manejar la espalda que el instrumento servil. Que cada uno haga aquello para lo que está hecho y todo irá bien.”
¿A dónde quiero llegar? A esta idea: que nadie coloniza inocentemente que tampoco nadie coloniza impunemente; que una nación que coloniza, que una civilización que justifica la colonización y, por tanto, la fuerza, ya es una civilización enferma, moralmente herida, que irresistiblemente, de consecuencia en consecuencia, de negación en negación llama a su castigo.
Los hechos prueban que la colonización, deshumaniza incluso al hombre más civilizado, que la acción colonial, la empresa colonial, fundado sobre el desprecio del hombre nativo y justificada por este desprecio, tiende inevitablemente a modificar a aquel que le emprende, que el colonizador, al habituarse a ver en el otro a la bestia, al ejercitarse en tratarlo como bestia, para calmar su conciencia, tiende objetivamente a transformarse el mismo en bestia, este golpe devuelto por la colonización, era importante señalarlo. Además entre colonizador y colonizado solo hay lugar para el trabajo forzoso, para la intimidación, para la presión, para la policía, el robo, para la violación, para la cultura impuesta, para el desprecio, para la desconfianza, para la morgue, para la presunción, para la grosería, para las elites descerebradas, para las masas envilecidas. Ningún contacto humano, solo relaciones de dominación y de sumisión que transforman el hombre colonizador en vigilante, suboficial, en comité, en fusta, y al hombre nativo en instrumento de producción. Colonización=cosificación.
Hablan de civilización, y el autor habla de proletarización y de masificación.
Una pequeña historia sobre los Estudios Subalternos Dispesh Chakrabarty
Estudios subalternos: escritos sobre la historia y sociedad india comienza en 1982 como una serie que pretendía intervenir en algunos grupos debates directamente con la escritura de la historia moderna de la india, tenido un alcance intelectual de Estudios Subalternos sobrepasando la disciplina de la historia asociándolo al pos colonialismo. Como un proyecto de escritura de la historia.
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