Anecdota El viaje perfecto

Anécdota

El viaje perfecto estaba planeado, todo estaba preparado y nos encontrábamos listos para comenzar. Con las maletas llenas y con la mejor actitud, mi primo y yo llegamos al aeropuerto de la ciudad de León, Guanajuato para abordar nuestro vuelo a España.

Volaríamos de la ciudad de León con destino final a Madrid y una escala en Atlanta, por lo que tuvimos que checar que nuestras visas y pasaportes estuvieran vigentes, sin embargo, al momento de hacer el "check-in" para abordar, una de las empleadas de la aerolínea me negó el acceso al avión debido a que mi pasaporte vencía dentro de tres meses, y, para entrar a España, éste tiene que tener por lo menos seis meses para que expire. Se me erizó la piel, la cara se me puso roja y las piernas me empezaron a temblar, el viaje que había planeado con tanta emoción, estaba arruinado y todo por la flojera de no prever éste tipo de situaciones.  

La guerra de argumentos empezó, todos los recursos argumentativos que había aprendido en mis dos semestres en la facultad de Derecho los puse en práctica, pero todo fue en vano.  no había forma de que pudiera abordar ese avión, fue entonces cuando se me ocurrió llamarle a la persona que más confianza le tengo, mi abuelo. Le conté lo sucedido a lo que respondió: "pues si está de la fregada hijo, pero vamos a ver que podemos hacer". En ese momento agarre mi maleta, tomé un uber y me fui a la secretaría de relaciones exteriores, mi abuelo después de una hora llego y empezaron las negociaciones para poder sacar el nuevo pasaporte ese mismo día y dada a la perseverancia, después de 5 horas lo logré, pude renovar mi pasaporte ese mismo día, bastó con cambiar mi boleto de ida y al día siguiente  ya estaba volando para comenzar el viaje,

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