Análisis del Caso: Drogas, Narcotráfico, Corrupción... Un reto que prevalece a los sexenios

Análisis del Caso: Drogas, Narcotráfico, Corrupción… Un reto que prevalece a los sexenios.

“Hacia finales del gobierno del presidente Felipe Calderón, México pasaba un momento de inseguridad que había afectado, de una u otra manera, a la mayoría de los habitantes del país. Esta situación no era nueva y no se había logrado eliminar ni con el cambio de presidentes ni con el cambio de partido político en el gobierno federal.”

Este caso muestra una serie de eventos relacionados a los sexenios de Vicente Fox y Felipe Calderón, asociados a los índices en materia de seguridad pública, derivados de la creciente participación del narcotráfico en el país, así como los altos índices de una corrupción heredada después de 70 años sin alternancia en el poder.

Las acciones para erradicar la proliferación del narcotráfico en México, marcaron el inicio de una de las estrategias más violentas en el país en donde la sociedad, integrada por civiles, fuerzas armadas y narcotraficantes, registraron muertes producto de las acciones emprendidas.

El triunfo de Vicente Fox, por parte del partido Acción Nacional, en las elecciones del año 2000 y después de 70 años sin alternancia en el poder, marcó un importante cambio en México.

Con el cambio de gobierno, se eliminaron los lazos entre el gobierno y los narcotraficantes, lo que permitió que los carteles aumentaran su poder, aprovechando para aumentar su influencia, pues ello simbolizaba la transición a un gobierno más débil.

La percepción de corrupción se incrementó desde el primer año de gobierno de Vicente Fox y continuaría con esa tendencia hasta fines del periodo del presidente Calderón, ya que de acuerdo al Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) de la organización Transparencia Internacional, México tenía un puntaje de 3.2 en 1999 y 3.5 en 2006; en 2013, ya con Peña Nieto, caería al lugar 106 en el mundo. Mientras tanto, 75% de los mexicanos consideraron un aumento en la corrupción en el país de 2007 a 2013, de acuerdo al mismo estudio.

El cambio en la operación de las organizaciones criminales durante el sexenio de Vicente Fox paso de enfocarse casi sólo a traficar la droga, a controlar también las rutas, tornando así el conflicto en un problema territorial, lo cual se amplió a la distribución y el consumo de la droga en México.

La deserción de miembros del ejercito para incorporarse a las organizaciones criminales registró la baja de entre 260,000 y 280,000 miembros del Ejército, tan sólo en 2006, se considera que más de 20,000 soldados dejaron el uniforme para unirse a las filas criminales, principalmente al cártel de Los Zetas.

Por otra parte, el “Efecto Globo” que mostró el cambio de roles entre Colombia y México se dio también porque, a partir del 2000, fue más fácil para los narcotraficantes colombianos introducir la droga ilegal en México que llevarla directamente a Estados Unidos, aprovechando el aumento en el índice de corrupción.

Durante este sexenio las cifras fueron 17,648 homicidios, lo que equivale a 18 homicidios por cada 100,000 habitantes o a 48 homicidios diarios. Por su parte, la Secretaría de Seguridad Pública mostró la cifra de 26,769 homicidios, aún más alarmante que la anterior, y equivalente a 26 homicidios por 100,000 habitantes o 70.5 homicidios diarios.

Felipe Calderón propuso que su administración trabajaría sobre tres ejes: la seguridad pública, la lucha contra la pobreza y el empleo y su estrategia en materia de seguridad publica empezó con miembros efectivos del Ejército, junto con miles de soldados de la marina y el nombramiento de decenas de oficiales militares como jefes de policía en las ciudades.

El 13 de diciembre de 2006 se dio el primer golpe (a sólo unos días de iniciada su presidencia) con la incursión militar en las tierras altas de Michoacán. También se comenzó la ofensiva cerca de la frontera con Estados Unidos, en Acapulco y en Sinaloa. La Policía Federal hizo la mayor redada de drogas en efectivo dentro de una casa en la Ciudad de México al apoderarse de más de 200 millones de pesos, al parecer, de la venta de metanfetamina de cristal.

Para octubre, infantes de Marina irrumpieron en un barco de contenedores en el puerto del Pacífico de Manzanillo y se apoderaron de 23,562 kilos de cocaína oculta bajo un piso falso y supuestamente ligada al Cártel de Sinaloa. Se extraditaron a capos y traficantes de EUA. Sólo en 2007, se capturaron a 83 sospechosos de los cárteles más importantes de México.

El gobierno de Estados Unidos en varias ocasiones había presionado a México y a otros países productores o de tránsito de la droga para combatir el problema y, cuando Felipe Calderón lanzó la ofensiva militar, su apoyo se vio casi de inmediato a través de la Iniciativa Mérida, elaborada en marzo de 2007 entre el presidente de Estados Unidos, George Bush, y Felipe Calderón. En esta iniciativa, EUA se comprometió a dar dinero para ayudar a combatir la delincuencia, esto continuó con el gobierno del presidente Barack Obama con alrededor de 330 millones dólares para 2011 y 2012

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