Basta De Historias

A Latinoamérica le falta una dosis de humildad para darse cuenta de la verídica posición de las universidades y centros de investigación en donde habitamos.

China es un ejemplo de humildad. Ellos están haciendo las cosas de una buena manera y, sin embargo, tienen una humildad impresionante. La mayor parte de las personas que habitan en Latinoamérica, tiende a criticar el sistema educativo por la condición de los edificios escolares o por el trato que adoptan los niños en las escuelas, más que por la enseñanza que se les brinda. Es muy preocupante que las universidades más prestigiosas de América Latina a pesar de sus logros, están en los últimos puestos de los rankings internacionales de las 200 mejores universidades del mundo. A pesar que México y Brasil son una de las 12 economías más grandes del mundo, apenas tienen una universidad en este ranking y se encuentran en los últimos puestos. Por ejemplo, México posee 110 millones de habitantes, con un producto interno bruto de 1600 billones de dólares, mejor que otros países y aun así estamos muy abajo en cuanto a la educación de otros países. Las grandes universidades latinoamericanas están abarrotadas de estudiantes pero estos están mal adiestrados, ya que cursan carreras que ofrecen poca salida laboral y no están a la par con el conocimiento de su economía. Otra parte muy alarmante es que Latinoamérica posee menos del 2 % de la investigación mundial, que está pasando, y esto también ocurre en África. Los países que trabajan en la investigación a nivel Latinoamericano son: Brasil, México, Argentina y Chile.

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