Calidad educativa en colegios de primaria y secundaria en Bogotá

Calidad educativa en colegios de primaria y secundaria en Bogotá

Gabriela Soto

Cristian González

Junior Gabriel Clerveaux

Universidad de Sanbuenaventura

Pensamiento Investigativo y Teoría del Conocimiento

Bogotá, Colombia

2020

Tabla de contenido

1.        Problema        3

1.1        Identificación del problema        6

2.        Marco Teórico        7

3.        Bibliografía        9

1. Problema

En las escuelas de Bogotá hay un problema de calidad y equidad. La tasa de analfabetismo ha caído drásticamente en los últimos años, a pesar de que se han realizado muchos esfuerzos. Existen muchos problemas de infraestructura en las escuelas, con discriminación, problemas de género y étnicos, impiden el buen desarrollo de los estudiantes, todos estos problemas generan deserción en la escuela a más baja edad, en términos de calidad y éxito en las pruebas nacionales e internacionales, ya sea en ciencias, lectura o matemáticas, fueron pobres, especialmente en comparación con los de otros estudiantes de otras ciudades sudamericanas.

 El sistema educativo no parece asegurar la transmisión del conocimiento, hallazgo confirmado por las tasas brutas de egresados ​​del sector superior. El 48% de los graduados de la escuela no puede entender el texto básico, el 62% no puede hacer cálculos simples y las tasas de deserción están aumentando una de las razones del bajo rendimiento de los estudiantes es el enfoque tradicional único de la educación, que no logra mantener el interés de los estudiantes y no satisface las necesidades de la economía del conocimiento.  

Las escuelas privadas son comunes en Bogotá y muchos padres las prefieren a las escuelas públicas debido a los estándares de educación más altos, mejores proporciones de personal a estudiantes, maestros calificados internacionalmente y mayor seguridad en sus instalaciones. Algunas de estas escuelas fueron fundadas por instituciones católicas y su enfoque está marcado por posiciones religiosas, por lo que se recomienda que comprenda la filosofía educativa de la escuela elegida antes de enviar las solicitudes de ingreso. Las tasas de matrícula varían, pero esperan pagar entre $200 y $ 800USD por mes lo cual representa un problema ya terminan siendo inasequibles para las personas que cuentan con pocos recursos económicos.

A pesar de los esfuerzos que continuamente se hacen, hay dos tareas pendientes: primero, continuar el trabajo de mejora de la calidad, ya que solo el 26% de las escuelas públicas se clasifican en las categorías “A +” y “A” según los resultados de los alumnos en las pruebas Saber 11. En segundo lugar, universalizar la cobertura de las escuelas intermedias (grados 10 y 11), actualmente la tasa de asistencia de la población en edad escolar (5-17 años) es del 95%.  Aunque las tasas de cobertura han mejorado en cada nivel de educación, la matrícula durante estos 20 años ha aumentado muy poco, debido a la disminución de más de 100.000 estudiantes en las escuelas públicas durante los últimos 10 años.

Observando desde un ángulo más profundo y analizando los resultados de la administración anterior.

 “La administración de Enrique Peñalosa tuvo que dedicar gigantescos recursos a la publicidad para mejorar su deteriorada imagen ante los ciudadanos del país. La campaña “impopulares pero eficientes” terminó siendo muy costosa para los ciudadanos, pero eficiente para el alcalde, quien mejoró algunos puntos de su imagen pública.” (De Zubiría Samper, 2020) 

Se puede dar razón de que la mala distribución y corrupción de los recursos suele ser uno de los problemas  más comunes y tiene a ser mucho más severo  cuando de recursos públicos se tratan. Este problema afecta a una gran cantidad de sectores en Colombia, pero el de interés para esta investigación es el sector de la educación y delimitándolo a Bogotá. 

La Secretaria de Educación del Distrito en el periodo del alcalde Enrique Peñalosa concentro sus esfuerzos junto con sus recursos en fortalecer el Programa de Alimentación Escolar (PAE), que se puede comprobar al constatar cifras como las más de 900 mil raciones diarias entregadas o los 1.1 billones de pesos que se utilizaron construcción y mejoramiento de sedes educativas por todo Bogotá, todo esto representa un trabajo y esfuerzo gigantesco, pero es de esperarse ya que este sector social es el que cuenta con más recursos tanto en Bogotá, y en todo el país.

“Para ofrecer la mejor educación pública del país, el gobierno de Enrique Peñalosa destinó 15 billones de pesos (1,7 billones más que la administración anterior). Una cifra sin precedentes que también tiene una ejecución sin precedentes: 99,9 % anualmente desde 2016.” (Secretaría de Eduación del Distrito, 2018)

Se observa una mejora en la infraestructura educativa, pero es muy leve lo que se puede ver en materia de calidad en la educación, se observa un pequeño avance en la tasa de deserción (3.6% a 1-7%), se atribuye todo esto a la falta de atención en temas de esenciales que intervienen en la calidad, como lo son la formación y valoración de los docentes, clima en los salones o el liderazgo pedagógico.

1. Identificación del problema

Los verdaderos avances en cuanto a calidad en al educación, se observan en la administración de Luis Eduardo Garzón y Samuel Moreno, esto se debe a la estructuración en la formación de los docentes, los cambios en el diseño curricular, entre otros.

“En 2014 Bogotá ocupó el puesto 21 entre todos los municipios del país en los resultados de las pruebas SABER 11. Para 2018 ocupamos el puesto 53 y el puesto 67 durante el 2019. Eso sucede porque otras ciudades están fortaleciendo de mejor manera la calidad de su educación; entre las que sobresalen: Tunja, Pasto, Bucaramanga y muchas ciudades intermedias de Boyacá, Cundinamarca y Santander.” (De Zubiría Samper, 2020).

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